Mujer

18/5/2018

Ruidazo en repudio a los abusos sexuales en la Universidad de Tucumán

Unos 300 estudiantes, docentes y egresados participaron de un ruidazo contra los abusos sexuales en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), pocos días después que se conocieran las denuncias contra Eduardo Hassan, un docente de la cátedra  de Anatomía la facultad de Odontología. Fue una jornada impactante donde familiares de las víctimas se acercaron a reclamar, y el grito unánime fue que “no queremos más abusadores en la universidad, no queremos más a Hassan en la facultad”.


Días antes, la Comisión de Género de la Adiunt (gremio docente universitario) había presentado un pedido de investigación. 


El Centro de Estudiantes de Odontología (ligado a la Franja Morada) tomó la cátedra de Anatomía para evitar que se sigan dictando clases. Pero su conducción restringe las denuncias a la cátedra, a diferencia del ruidazo, que denunció no sólo al abusador sino también a las autoridades que encubrieron durante más de 20 años al docente. Incluso el mismo centro de estudiantes conocía la situación y nunca organizó nada. 


El día del ruidazo, las autoridades de la facultad y la universidad salieron a decir a los medios que existía un protocolo ante violencia de género y que estaban esperando que las víctimas presenten las denuncias por escrito. Pero, ¿qué confianza pueden tener las víctimas en presentar una nota por escrito a los que fueron encubridores de los acosadores y que nunca hicieron nada?. 


Luego del ruidazo, en menos de dos horas la facultad ya había designado a las personas “especialistas en recibir la denuncia” que establece el protocolo.  Pero en realidad no se designó a nadie, sino que se le dio esa función a dos trabajadoras que hace años están en la facultad, en una muestra de improvisación. No existe una verdadera preocupación para salir a enfrentar el abuso y los abusadores en la UNT.  


Por todo esto, es necesario que se implemente un presupuesto para que efectivamente el protocolo funcione, y que las personas designadas sean propuestas y electas por el movimiento estudiantil y docente, y no a dedo por amiguismo o conveniencias de las camarillas. 


Este movimiento que comenzó a levantarse convocó a un nuevo ruidazo para el martes 22 al mediodía en la puerta de la facultad, el reclamo se tiene que multiplicar para sacar efectivamente a Hassan de la universidad al igual que todos los abusadores.