Se viralizó en las redes sociales un video en que una mujer patotea a los gritos en la calle a nuestra compañera y diputada nacional, Romina Del Plá, por llevar los pañuelos verde y naranja (símbolos de la lucha por el derecho al aborto legal y por la separación de la Iglesia del Estado).

 

La acción es claramente una patoteada, lo que pinta de cuerpo entero a quienes actúan en función de la manija clerical y oscuratista que reclama pisotear los derechos de las mujeres y la diversidad, mandarnos a callar, mantenernos sometidas y sumisas, y rechazan nuestra libertad. No hay ninguna "defensa de la vida" detrás de ataques callejeros de este nivel.

 

La solidaridad con Romina que crece en las redes sociales, ante la difusión del video, muestra la contracara de este ataque pusilánime: que la marea verde y la lucha por nuestros derechos crece y se construye sobre bases antagónicas, la defensa de la libertad y el rechazo a las imposiciones, los abusos, los ataques y patoteadas contra las mujeres. ¡Grande Romina!