Mujer

3/6/2019

Un “premio” contra los derechos de la mujer trabajadora

La Democracia Cristiana homenajeó a Leandro Rodríguez Lastra, ginecólogo condenado por no practicar un aborto no punible

candidata a presidente del Concejo Deliberante de Cipolletti por el FIT

El jueves pasado, en el local partidario de la Democracia Cristiana de Buenos Aires, se otorgó un “premio” al ginecólogo Leandro Rodríguez Lastra, recientemente condenado por incumplimiento de los deberes de funcionario público al negarse a practicar la Interrupción Legal del Embarazo a una joven de 19 en el hospital de la ciudad de Cipolletti, que había sido víctima de una violación.


En la entrega de la condecoración, el presidente del partido, Carlos Traboulsi, hizo una abierta apologia de la violación del protocolo de aborto no punible (ver Perfil, 31/5) y consideró a Rodríguez Lastra un “símbolo” de la causa de las dos vidas.


Este infame premio pretende reforzar la campaña de los anti-derechos no solo contra el proyecto de ley por el aborto legal, seguro y gratuito, sino también contra el aborto no punible y la educación sexual integral, laica y científica.


El rol de la Democracia Cristiana en hacer punta contra los derechos de la mujer trabajadora, viene acompañado con el de llevar a Jorge Sobisch, responsable político e intelectual del asesinato y fusilamiento del maestro Carlos Fuentealba, como candidato a gobernador en Neuquén. Además, es socio politico de Horacio Rodríguez Larreta y Elisa Carrió. En su momento formó parte de la Concertación de Cristina Kirchner-Cobos, y posteriormente integró el partido de este ultimo, Consenso Federal.


Los partidos políticos patronales, como Cambiemos y el peronismo, tienen todo tipo de lazos con el clero. Esto explica los llamados de Cristina a unir pañuelos verdes y celestes y las declaraciones de Alberto Fernández, que habló de no “avanzar tan rápidamente en la legalización".


Pero se trata de un derecho impostergable, dada la muerte y mutilación de cientos de mujeres. 


Llamamos a todas las compañeras a romper con el sometimiento que el clero le impone a sus direcciones y fortalecer la lucha por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito. Vamos por una consulta popular vinculante que pase por encima a las huestes retrógradas de diputados y senadores anti-derechos. Nuestra lucha por la defensa de la salud y la vida de las mujeres, las niñas y las disidencias, es incompatible con las de los partidos políticos patronales.