Mujer

8/10/2009|1103

Una homilía contra el Encuentro

En vísperas del XXIV Encuentro Nacional de Mujeres, la Iglesia ha largado un ataque con todo.
El 24 de septiembre se hizo la procesión por el día de virgen de la Merced (“patrona” de Tucumán). En la misa, el arzobispo Luis Villalba condenó el aborto.

“Debemos subrayar el papel fundamental de la mujer como madre, defensora de la vida y educadora del hogar (…) su vocación a la maternidad. De la vocación materna brota la singular relación de la mujer con la vida humana (…) El matrimonio, la maternidad y la familia son valores fundamentales. No puede haber progresos reales a expensas de estos valores.”

Mientras la Iglesia no ahorra argumentos y moviliza para atacar el Encuentro Nacional de Mujeres, llamó a los autoconvocados de la salud a levantar las medidas de lucha y se muestra completamente pasiva frente al crecimiento de la trata de mujeres y niños, y la miseria general. En este marco, el PCR o el MST plantean que el recorrido de la marcha general del 12 evite la plaza Independencia para no tener que pasar por delante de la Catedral.