Mujer

21/11/2018

Vidal niega licencia por maternidad a madre no gestante

El caso de Malena Díaz Reck, trabajadora de ARBA.

Apel La Plata

Malena Díaz Reck, trabajadora de la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires, (ARBA) desde 1991. Solicitó hace más de tres meses licencia por maternidad, ya que espera junto a su pareja Natalia una niña, y aunque todavía no tiene respuesta definitiva del Director Ejecutivo de ARBA, Gastón Fosatti, desde la Asesoría General de Gobierno le aconsejan a ARBA negar la licencia por maternidad y otorgarle la licencia por paternidad. El argumento que plantean es que la licencia por maternidad es “la necesidad del descanso y recuperación que requiere la mujer con motivo del parto”. Si bien reconocen que existe un vacío legal y que en la Cámara de Diputados existen numerosos proyectos de ampliación de licencias por maternidad y paternidad que consideran necesarios, consideran que no pueden apartarse de lo establecido en la ley 10.430 actual, que no contempla la licencia por maternidad a la madre no gestante.


 Malena, militante del PTS, de La Marrón Clasista e integrante de la Comisión de mujeres trabajadoras de Arba-Economía expresó: “ Es un fundamento que claramente se basa en la productividad de esa trabajadora, de salud pero únicamente en función de recuperarse para volver a trabajar lo más rápido posible y no en función de la importancia del cuidado del recién nacido o nacida en los primeros meses de vida, pasando tiempo todos juntos, madre y padre, o los padres o las madres –como sería nuestro caso– con sus hijos e hijas, generando los vínculos de amor y contención necesarios para el desarrollo del bebé”.


“Por un lado, esa respuesta es discriminatoria ya que yo no me considero una persona de género varón y no voy a ser padre. Yo me siento mujer y, aunque no la esté llevando en la panza a Brunna, voy a ocupar el lugar de madre”.


La ley 10.430 la licencia por paternidad otorga solamente de tres días, cuando la licencia por maternidad es de 90. Claramente es una ley que pone a la madre en el lugar de cuidado y crianza del bebé y desplaza de ese lugar al padre.


Al solicitar la licencia, con el acompañamiento de la Junta Interna de ATE-ARBA, Malena solicitó en su defecto que se le otorgara la licencia por adopción, que también consta de 90 días, ya que si bien Malena no es madre adoptiva, se podría aplicar a su caso ya que la licencia reconoce a una madre no gestante – la madre adoptiva. Este planteo también fue rechazado por el gobierno provincial.


Antecedentes


Existen antecedentes sobre casos similares, el más reciente es el fallo del Juzgado Nº 12 en lo Contencioso Administrativo y Tributario de CABA, el caso “N., G. M. contra GCBA sobre medida cautelar autónoma”, se trata de una profesora de Literatura de una escuela pública secundaria de la Ciudad de Buenos Aires, a quien se le otorgó la licencia por maternidad con el argumento de que la licencia por maternidad no se vincula a la gestación, sino el interés superior del niño o niña y su derecho de poder disfrutar de la familia los primeros meses de vida, sin importar si los une o no un vínculo biológico, entendiendo que la licencia por maternidad no se vincula solamente a la gestación, y que además debe ser interpretada armónicamente con los nuevos derechos de parentalidad, que no distinguen el género ya que el matrimonio igualitario fue reconocido por la ley de Matrimonio Igualitario.


Otro antecedente es la Resolución del Ministerio de Educación de General Roca de la Provincia de Río Negro, en el caso de Lorena Jerez y Jorgelina Fernández. Jorgelina fue la madre gestante y Lorena, quien es docente, solicitó la licencia por maternidad, la cual les fue otorgada en iguales condiciones que la madre gestante en mayo de 2018.


En el caso de que ARBA deniegue la licencia, como ya adelantaron informalmente desde la Gerencia de Recursos Humanos, Malena va a realizar una presentación judicial para exigir el cumplimiento efectivo del derecho que le corresponde, y para poder sentar jurisprudencia para que todas las personas que estén en esta misma situación puedan gozar de este derecho, junto a una campaña para el reconocimiento de la licencia. 


Más allá de los argumentos formales para denegar este derecho, lo que se encuentra de fondo es el vínculo del gobierno del Vidal con el clero, quien se opuso fervientemente al matrimonio igualitario, y recientemente reforzó es pacto político, tras la caída del proyecto de aborto legal, con el bloqueo de la reforma de la ley de educación sexual.  


Este reclamo se da en un contexto de ajuste, expresado en el enorme recorte en materia social del presupuesto del FMI, salgamos a las calles uniendo este reclamo al aumento salarial de acuerdo al índice inflacionario, jardines materno-paternales en todos los lugares de trabajo, reglamentación de la licencia por violencia de género y el cupo trans. Ampliación ya de licencias de paternidad y maternidad.