La LSR saluda la constitución del FIT y a este acto, porque es un primer paso para avanzar en la necesaria tarea de reagrupar a la vanguardia en Argentina y en América Latina … Vamos a una brutal agudización de la crisis y de las luchas provocadas por el agotamiento del modelo económico y la bancarrota del régimen político …

… El desafío que tiene planteado el FIT: sacar a la izquierda de ese pantano, incluso para las próximas elecciones. Tiene con qué hacerlo: se apoya en un programa principista y es la única expresión —aunque parcial— de la necesidad de reagrupar a la vanguardia obrera para encarar una pelea que excede al 3 de octubre. El FIT debe instalarse entre los explotados en una carrera contra reloj. Debe lograr que miles y miles de luchadores defiendan su programa y sus candidatos, así no pertenezcan a ninguna de las organizaciones aquí presentes …

No será una pelea fácil sino una dura batalla. Pero la LSR está convencida de que será posible triunfar en ella si somos capaces de plasmar en acciones comunes los acuerdos programáticos, en todos los terrenos de la lucha de clases. … El FIT debe ser capaz de impulsar la organización de miles y miles de comités de acción en apoyo a su programa y candidatos, posibilitando la integración de todos los luchadores. Que en cada empresa, barrio, facultad o colegio, actúen organizadamente todos los que apoyan al FIT y la candidatura de Zamora, Altamira y demás compañeros, dando también respuestas comunes a la lucha de clases que no pedirá cuarto intermedio hasta el 3 de octubre.

La LSR está convencida de que ésta es la mejor táctica para implantar electoralmente al FIT, porque responde también a la principal urgencia estratégica: la de reagrupar a la vanguardia obrera para construir una dirección clasista y revolucionaria frente a los grandes desafíos que tendremos planteados en el próximo período.

La LSR compromete todo su esfuerzo en esta tarea.

 

27/8/93