Partido

25/4/1995|445

El Partido Obrero en Campo Santo

El miércoles 19, un grupo de trabajadores realizó su objetivo de abrir un local del Partido Obrero en esta aguerrida ciudad salteña. Al acto de inauguración asistieron más de treinta compañeros y contó con la presencia de Jorge Altamira.


Campo Santo es una ciudad devastada por el vaciamiento capitalista, pues en un lapso de tiempo muy corto se quedó sin ferrocarril, sin fábrica de cemento y prácticamente sin ingenio —el San Isidro. La tentativa de reabrir la central azucarera por medio de una cooperativa de trabajadores ha concluido con la desaparición del aporte de capital que hicieron éstos por medio de sus indemnizaciones. Cuando el período de preparación de la zafra llega a su finalización, el ingenio no ha reabierto sus puertas, de modo que no habrá zafra ni trabajo, en 1995, en Campo Santo. La oligarquía de los Corvalán, propietaria del ingenio, intenta acogerse a la ley de quiebras, votada entre otros por Bordón, para transferir la propiedad del ingenio sin pagar deudas, ni a sus trabajadores, y restablecer la producción en condiciones de negación de los derechos laborales. Entre tanto, la burocracia que “ideó” la formación de la cooperativa, se quedará con los aportes de  sus trabajadores.


El departamento de General Güemes es un polvorín, como lo atestiguan las huelga de hambre de los trabajadores de la capital del municipio y las continuas manifestaciones. Para que este movimiento de lucha no se agote es necesario conformar una Asamblea Popular que llame a un Congreso Provincial de trabajadores y a la huelga indefinida.


¡Viva la iniciativa de los compañeros del PO de Campo Santo!