MANIOBRA K DE FIN DE AÑO

Aprovechando el fin de clases, el gobierno nacional se apresta a intervenir la UBA, cediendo las instalaciones del Congreso para realizar la Asamblea Universitaria reaccionaria el próximo 18 de diciembre. Sabe que está violando los estatutos de la UBA, o sea la autonomía universitaria, ya que éstos señalan sin lugar a equívocos que la Asamblea sólo puede realizarse en instalaciones de la Universidad. Las camarillas privatizadoras han previsto, incluso, que en caso de no conseguir la convocatoria por parte del Consejo Superior, efectuarían una autoconvocatoria, algo que hasta hace poco ellos mismos descartaban por ilegal.

Para el gobierno, esta intervención sería esencial para evitar que la crisis universitaria interfiera negativamente en la campaña electoral de Filmus durante el año 2007.

Las camarillas saben que la realización de la Asamblea Universitaria en el Congreso trae aparejada la custodia de la Policía Federal. Los cuatro decanos ‘progres’, que habían jurado que nunca entrarían a una Asamblea con custodia policial, quedarán ahora completamente desenmascarados.

Alterini al poder

Pero las camarillas privatizadoras y el gobierno nacional acaban de protagonizar un gran papelón político, con cruces de ambos lados y fuertes denuncias de operaciones políticas destinadas a perjudicar a sectores de su propio bloque político.

La piedra del escándalo fue una solicitada publicada por los decanos promotores del “pacto de Olivos”, el jueves 30. La solicitada apareció con la firma del ex candidato a rector Atilio Alterini, un anatema para un sector del kirchnerismo, que acusó directamente por el engaño a Alberto Fernández, el jefe de Gabinete. En un comunicado público aseguraron que: “La UBA agoniza y Alberto Fernández desconecta el respirador”.

La intervención K servirá a las camarillas privatizadoras, en primer lugar a las que responden al radicalismo de los Alterini y Shuberoff. Son estos sectores justamente los que se harán del poder de la UBA. La mayoría de la secretarías, entre ellas las principales como las de Hacienda y la General, serán entregadas a los mismos funcionarios que Alterini iba a poner en su fracasado rectorado.

Un momento decisivo

La crisis desatada por la solicitada subraya las enormes contradicciones que se concentran en el bloque que pretende hacerse del Rectorado.

La Fuba , junto a la AGD, los “docentes autoconvocados por la democratización” y otros sectores de trabajadores han planteado claramente una salida: 1) triplicación del presupuesto; 2) establecer de manera inmediata la renta para todos los docentes ad honorem y la gratuidad de los posgrados; 3) reformar los estatutos universitarios previa consulta democrática a los estudiantes y trabajadores de la UBA; 4) elección de las nuevas autoridades.

En base a este programa llamamos a los estudiantes, docentes y no-docentes a profundizar la movilización contra la intervención K y el “pacto de Olivos de los decanos”.

Gabriel Solano