Al momento de salir este numero de Prensa Obrera estaremos redondeando un 40% de los objetivos económicos que nos trazamos. Una primera tanda de los partes previstos con motivo del aguinaldo ha comenzado a entrar, pero todavía resta un gran trecho por recolectar.

Los más de 2.000 compañeros que han dado su colaboración económica funcionan como un indicador de la existencia de una nutrida camada de trabajadores y de jóvenes que respaldan la lucha que venimos librando por poner en pie una nueva dirección en los sindicatos y una alternativa política de los trabajadores, las dos grandes banderas e ideas convocantes que presiden la actual campaña financiera. Aportan quienes vienen librando con nosotros una lucha en común en los sindicatos -los aportes provienen de más de 40 gremios-, por organizar los lugares de trabajo y por poner en pie agrupaciones clasistas. Quienes vienen impulsando en común una perspectiva de lucha y de independencia política en la universidad, que hoy se concentra en la batalla por la convocatoria de un nuevo Congreso de la Fuba, desafiando el sabotaje conjunto de los radicales y de los K. El aporte se extiende a vecinos y a trabajadores de los barrios, que se han acercado a la campaña electoral y que se vienen sumando, en la actualidad, a las actividades que se realizan en los locales y a las distintas iniciativas de movilización. La respuesta resulta extremadamente positiva: revela la predisposición y el entusiasmo que anida en capas cada vez más amplias de la juventud y del movimiento obrero, por sumarse y hacer prosperar una alternativa de clase, revolucionaria, el gran desafío que tenemos por delante. Ese hecho es el principal aliento y respaldo en que nos tenemos que apoyar para impulsar la campaña y para alcanzar el éxito de esta.

El alcance de la movilización, sin embargo, no es todavía el que necesitamos si aspiramos a completar las metas que nos dimos. Debemos pegar un salto en el ritmo de la campaña. Esto vale para todos los sectores, pero en particular en el interior, donde hemos arrancado con retraso y donde es necesario recuperar el tiempo perdido. También para la juventud, que ha resuelto un plan especial para reunir los recursos con antelación al receso invernal.

En momentos en que ingresamos en un nueva etapa política, caracterizada por la ruptura de los trabajadores con el kirchnerismo, mayores son los desafíos y las responsabilidades de la izquierda revolucionaria, por abrir paso a una nueva perspectiva política, a una alternativa de carácter obrera y socialista. La batalla por los recursos es proporcional a esos desafíos y a esas responsabilidades. Llamamos a todos los simpatizantes, amigos, luchadores, a hacer su aporte y contribuir, de acuerdo con sus posibilidades y los medios a su alcance, en la recolección de fondos.