Chalecazo
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¡Otra vez volvimos a demostrar la verdad tal cual es!
Hubo un gran trabajo de organización para la convocatoria, pero valió la pena el esfuerzo, porque todos los compañeros asistieron de manera impresionante. Logramos estar más de 500 trabajadores uniformados, sentados en el Anfiteatro de Parque Lezama, diciéndole "presente" a la empresa.
Fue una experiencia conmovedora, vernos las caras todos juntos, otra vez, a ochenta días de conflicto. Sin dudas fue una postal totalmente contundente y positiva para los trabajadores en lucha; lo corrobora la deplorable y obligada decisión de la empresa de comprar todos los medios para que esa imagen no apareciera en ninguna pantalla de TV y continuar con la impunidad, los engaños y las mentiras. Lo que también demuestra lo poco que está agarrada la estrategia de la empresa porque una sola imagen podía hacerle caer una coartada que tardó ochenta días en armar.
Por si fuera poco, no permitimos que la ausencia de los medios nos frenara. Decidimos marchar e ir a buscarlos nosotros. Como respuesta de las fuerzas represivas, tuvimos un terrible operativo de censura a nuestra protesta y un claro ataque a nuestra libertad de circular por las calles de Buenos Aires. Este gran accionar de la policía y el increíble despliegue de sus fuerzas, al punto de generar una zona liberada sobre Paseo Colón de dos cuadras de ancho por cuatro de largo, habla de la importancia de nuestra lucha, y de la repercusión que generamos cada vez que la gente nos mira por la tele o nos escucha por la radio. (…)
El mensaje que les enviamos es claro: ¡no pueden hacer desaparecer la lucha de los trabajadores del Casino! Entendamos la importancia que tuvo esta acción de los trabajadores. (…)
Nuestra mira debe apuntar al Casino porque ahí es donde realmente debemos dar la lucha, ya que sabemos que un casino sin clientes no funciona. (…)
Hoy más que nunca, apropiémonos de nuestros logros, entre los cuales definitivamente está el chalecazo (…) Fue una gran satisfacción para todos observar los escalones del Anfiteatro del Parque lleno de los colores de nuestro trabajo, de lo que representamos, de lo que somos, de lo que jamás podrán quitarnos.
