El Partido Obrero de la Ciudad ha lanzado una campaña para conquistar la totalidad de las afiliaciones exigidas por la Justicia electoral. Frente a la reforma electoral proscriptiva, pactada por oficialistas y opositores, nos ponemos en campaña para defender una presencia obrera y socialista que batalle contra las corrientes capitalistas.

Construcción política

La campaña de afiliaciones que tenemos por delante estará íntimamente ligada con nuestro desarrollo político en la Ciudad. Nos proponemos alcanzar el conjunto de las afiliaciones requeridas sobre la base de afiliar a la militancia, al activismo que interviene con nosotros en los gremios, universidades y barrios, a los simpatizantes y amigos del partido. De esta manera, nos preparamos para debatir con los activistas del Subte, de telefónicos, periodistas, gráficos, con los docentes, estatales y con el resto de los gremios para que colaboren con el derecho democrático de que el PO pueda presentarse en las próximas elecciones. La UJS ocupa un lugar central en esta campaña. En todas las facultades y en los CBC impulsaremos que la juventud combativa que lucha junto a la Fuba se afilie masivamente. El Polo Obrero, por su parte, colaborará con la campaña en las asambleas, en los barrios y las villas.

En el marco de la agitación callejera que estamos impulsando por el no pago de la deuda externa, incorporaremos la afiliación junto a la venta de la Prensa Obrera, para aprovechar la agitación y avanzar en la organización de las relaciones que surgen en los barrios.

Nos planteamos aprovechar la lucha contra la reforma reaccionaria para avanzar en la afiliación, la organización y estructuración del activismo y de la periferia. Se trata de encarar la campaña de afiliación no sólo como un escollo legal a vencer, sino como la oportunidad para una campaña de construcción y desarrollo partidario.