El 23 de febrero sesionó el congreso de Cicop. Con la presencia de 35 seccionales, el debate estuvo atravesado por la impasse completa de las paritarias del sector -postergadas ya dos veces por el gobierno provincial- y por el agravamiento de la crisis hospitalaria en toda la provincia.

Todas las intervenciones daban cuenta de una profunda crisis por falta de trabajadores y hasta cierres de servicios en los diferentes hospitales, principalmente en pediatría, neonatología y maternidad. La "estrella" del congreso fue el anuncio del cierre de la maternidad del Hospital Fiorito de Avellaneda; es el primer cierre en un hospital del primer cordón del conurbano, situación ya habitual en el segundo y tercer cordón. A la falta de personal, que se agudiza con la parálisis de los nombramientos prometidos, se le agrega la crisis con los insumos a partir del decreto de "emergencia administrativa" de Zin-Scioli que amenaza la provisión de los mismos en toda la provincia.

El incumplimiento gubernamental de los acuerdos de la paritaria del segundo semestre de 2007, ya magros (8% de aumento contra 20% acordado originalmente, decretos de presentismo y otorgamiento de zona desfavorable a los hospitales de Escobar y Catán), llevó a muchos congresales a criticar el levantamiento del plan de lucha de 2007; muchos plantearon que las nuevas medidas votadas no pueden levantarse hasta que se obtenga lo reclamado.

A pesar de que varias seccionales propusieron un mandato de paros progresivos, finalmente ganó la moción de paros de 24 horas para el martes 26 (que fue un parazo sentido en toda la provincia) y el miércoles 5, con cortes en Ricchieri y Panamericana, con nuevo congreso el 8 de marzo. Han fracasado en todos sus intentos de llegar a un acuerdo indoloro con el dúo privatista Zin-Scioli, dejando pasar incluso despidos de afiliados a la entidad. El reclamo salarial (2.700 pesos de bolsillo inicial, reclamo que se impuso contra los 3.100 y canasta profesional que mocionaron los delegados del hospital del Km 32, de Catán), va fuertemente acompañado de los 1.500 nuevos nombramientos necesarios y el aumento del presupuesto de salud provincial. El congreso del 8 de marzo tiene la oportunidad de profundizar las medidas frente a la pavorosa crisis hospitalaria.

Las medidas de lucha de los profesionales de la salud son la oportunidad para llamar al resto de los trabajadores del sector a realizar asambleas y sumarse al plan de lucha frente al silencio de ATE y Salud Pública. También para impulsar el apoyo organizando comisiones de pacientes en defensa de la salud pública.

Corresponsal