Partido

20/12/2007|1022

Elvia De la Cruz

A los 67 años, un derrame cerebral se llevó a nuestra compañera Elvia. Llegó desde su Uruguay natal hace más de veinte años, según sus propias palabras, por el “exilio económico”, la falta de trabajo y de perspectivas. En Uruguay estaba relacionada con el Partido de los Trabajadores.


Desde que llegó a Argentina colaboró incansablemente durante veinte años en las tareas del local central del PO. Una simpatizante firme y consecuente, en todas las elecciones se daba maña para que sus familiares argentinos votaran por el Partido Obrero.


Lo que distinguía a Elvia era una enorme cordialidad en el trato con todos los compañeros. Su preocupación, que provenía de sus propios problemas de salud, era que los militantes del PO se cuidaran y se mantuvieran sanos. “No tomés tanto café, que te hace mal; mirá que me vas a hacer enojar”, repetía a cada rato. Trataba a los jóvenes (y a algunos que no son tanto) como sus hijos. Nos rezongaba y nos reprendía para que mantuviéramos el orden y la limpieza, que era su responsabilidad en el local.


Elvia luchó contra las enfermedades. Consiguió zafar de un tumor. Pero yendo a uno de sus controles periódicos, al salir de su casa, tuvo un derrame cerebral por el que hubo que internarla. Ya internada, tuvo un segundo derrame que no pudo aguantar.


Recordaremos a Elvia como una mujer trabajadora, como una compañera y una madre “autodesignada” que se preocupaba por cada uno de nosotros.


Nuestro recuerdo para Elvia y nuestro acompañamiento para sus hijos Irene y Jorge, y sus nietos.