Falleció nuestra compañera Marissa Monchietti, luego de una enfermedad irrecuperable. Marissa estuvo con el Partido Obrero hasta donde le dieron sus posibilidades.

Por su profesión de partera, Marissa viajaba por Córdoba y también a Mendoza a cubrir guardias. Donde ella iba, iban el PO, su prensa, su propaganda. Iba una luchadora.

Marissa venía del Partido Comunista. A principios de los ‘90 se sumó al PO de la mano de una de sus hijas, nuestra inolvidable Pelo, y de su yerno, Adrián, dirigente del PO de Río Ceballos. Desde entonces, nunca más se separó de nuestro partido.

Aunque no podía tener una militancia regular por su trabajo, era una militante permanente a favor del partido. Batalladora, incansable, buscaba siempre un resquicio para que entraran las ideas del partido. Así era Marissa.

Por eso su familia es una familia de militantes.

La tengo presente, con sus llamados para comentarme hechos y problemas que podían importar al partido, con sus comentarios agudos e incisivos, con su ironía inteligente.

Marissa Monchietti es parte de la historia del PO cordobés. Nos sentimos orgullosos de ello.

A su hija Gaby, a Adrián, a sus nietos, nuestro fuerte abrazo y acompañamiento.