Partido

3/4/2008|1031

MENDOZA | El convenio de los obreros de la uva

Salarios de miseria y boom exportador

Si hay una imagen que refleja las relaciones laborales en la vitivinicultura, es sin duda la de la camioneta 4×4 del empresario Javier Palau, presidente del Centro de Bodegueros y Viñateros del Este, pasando por encima del piquete de obreros que manifestaba por aumento salarial frente a su bodega; seis compañeros quedaron heridos.

Este hecho ocurrió en el marco de un plan de lucha de Foeva, mientras se discutían las paritarias.

La burocracia de Foeva se bajó de un reclamo de 350 pesos de aumento a 290 pesos para obreros de bodegas y 270 pesos para los de viña, sobre salarios que actualmente apenas superan los 1000 pesos. Con el aumento firmado, los compañeros van a cobrar 1.300 pesos, menos de la mitad de la canasta familiar actual. El acuerdo que acaba de firmarse tiene vigencia hasta febrero de 2009; cuando venza el convenio, la inflación de todo este año habrá reducido esos salarios a una completa miseria. Para los cosechadores, el tacho ha sido fijado en 1,20 pesos (1 peso de bolsillo).

En estas condiciones no es extraño escuchar las quejas de esos señores de las 4×4 porque no hay quién levante la cosecha.

Esta superexplotación se da en el marco de un boom exportador de vinos de alta calidad y el copamiento de la propiedad de la tierra cultivable y de las bodegas por parte de capitales imperialistas, que no sólo imponen condiciones de vida miserables a los obreros, sino también a los contratistas de viña y pequeños productores.

H.F.