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7/12/2006|975

"No nos van a sacar de la ruta"

HABLAN LOS ASAMBLEÍSTAS DE GUALEGUAYCHÚ

-¿Cuál es la situación en este momento?

E.: -La situación es de desilusión con este Estado que nos desprotege. Por ahí habrá alguien que esté conforme, pero en general nos sentimos bastante desprotegidos.

-¿Había expectativas en el recurso presentado ante La Haya?

E.: -No, le tiraron un salvavidas de plomo al chico que se había ahogado hacia dos años. Fue una fantochada, una payasada política. Igual hubo que aceptarla, porque no se puede ir en contra de algo que se ha estado pidiendo. En el año 2003 sale un proyecto de resolución aprobado por unanimidad, solicitándole a la Cancillería que haga el reclamo que corresponda por la violación del Estatuto del Río Uruguay por parte de Uruguay. Con el otorgamiento de una zona franca le regalaron a la empresa Botnia parte de una frontera, parte de un río compartido.

-La Haya falló en contra, el BM otorgó el crédito. ¿Cómo sigue esto?

E.: -Esto es una guerra. No nos han declarado la guerra, pero ya tienen armas químicas emplazadas apuntando hacia nosotros. El corte sigue. Parece que el corte es lo que más llama la atención, pero es nada más que un síntoma, un alerta, el problema es otro. Acá estamos todos a la expectativa con el corte, yo personalmente creo que es la última actitud pacífica que tendremos.

-¿Hay algún movimiento en Uruguay en contra de las pasteras ahora que Botnia está creciendo a pasos agigantados?

E.: -Hay un movimiento, pero no tiene voz. El Estado uruguayo domina todas las expresiones, todo lo que se dice. Hace muy poquito, yo no estoy bien enterado de cómo fue, un periodista argentino en Montevideo fue muy maltratado, incluso por las autoridades, la policía; fue víctima de apremios ilegales. Tanto es así, que yo en este momento tenía que estar presentando mi libro en Mercedes (Uruguay), y por consejo de la gente del movimiento que me ayudaba a presentarlo, el editor desistió de la propuesta.

-¿Qué expectativas hay en el gobierno de Kirchner?

E.: -Yo no tengo ninguna expectativa, al gobierno lo veo como cómplice. Cómplice absoluto. Viene 10 cuadras atrás. Nos pone al frente a nosotros y él viene 10 cuadras atrás. Y cuando se logra algo dice “qué valientes que somos”. Pero él no logró nada.

Por ahí hay gente que no conoce esto y le cree. Para saber lo que es este movimiento, hay que estar acá. Nosotros no somos los piqueteros que él (Kirchner) logró comprar o destruir en Buenos Aires. Esto es una ciudad que está defendiendo la vida. ¿Gente con precio? Ha habido dos o tres, y están muy bien identificados.

-¿Generó alguna ilusión la designación de Romina Picolotti al frente de la Secretaría de Medio Ambiente?

E.: –A alguna gente sí, porque, bueno, son políticos, hablan hermoso, por ahí uno hasta termina creyéndoles, pero… Estaba medio dividido, fue motivo de grandes discusiones en las asambleas nuestras… Yo no me desilusioné porque no tenía esperanzas. Los que estaban ilusionados no comprendían que era un grupo al que había contratado el gobierno provincial, que obedece al gobierno nacional, que a su vez obedecen a Botnia. Pero, bueno, en este momento tenemos un gobernador y un presidente. Un vicegobernador, que es de Gualeguaychú, pero nos quieren sacar de la ruta. La última que hicieron fue tratar de asustarnos con identificaciones. Después de eso mandó sacar fotos de los coches que habían venido al corte. Entonces, para hacerle más fácil la cosa, nosotros escribimos la patente con tiza, bien grande ahí y la palabra “whisky”, cosa de salir linda en la foto (risas), y atrás, “sonría, lo están filmando”. Y hubo montones de gente que hizo lo mismo. Es más, se mandó todo el padrón de Gualeguaychú, con todos los nombres, porque eso es la Asamblea.

-¿Qué tendría que hacer el gobierno nacional?

E.: -Cortar la frontera. Lo que estamos haciendo nosotros es todo un ejemplo para este buen hombre que no sé para qué lado mira. No se sabe. Él debería cerrar la frontera, romper relaciones, presentarse ante el gobierno de Finlandia, que fue con quienes firmaron el tratado de cooperación los uruguayos, y decirles: “Los culpables de esta situación son ustedes. Soluciónenlo”. Yo creo que ese es el único camino pacífico para solucionar esto: poner al culpable en el banquillo del acusado. Estamos nosotros en el banquillo del acusado con el corte. Es lo más ridículo que puede haber. Lo único que puedo pedir es acción al gobierno.

M.: -Que empecemos a defender lo nuestro y a exigir a los que elegimos y a los que les pagamos el sueldo que cumplan con sus funciones. Que cuando hablen con Finlandia le exijan la licencia social que allá se exige. Cosa que acá ni se pidió. Y no la van a tener. Y las papeleras no se van a instalar. No nos van a sacar de la ruta. Y cuando terminemos acá, vamos a ir por las papeleras argentinas y contra el uso de agroquímicos y todos los contaminantes.

 

Reportaje realizado por Gustavo Spektor y Adriana Sirna