“Nuestra decisión de construir un partido revolucionario"
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VIVIANA PUCCIO Y JORGE STEIMBACH SE INCORPORAN AL PO
“Desde que hemos comenzado a entender la teoría marxista, sabemos que el desenvolvimiento del proletariado ha planteado la necesidad de conquistar el poder. Es por esto que la estructuración del partido político es una necesidad histórica impostergable.
“Entendiendo, conforme lo indicó Engels, que el partido está constituido por la parte más consciente de la clase, es que intentamos siempre analizar las distintas ‘versiones’ que se nos presentaban y ‘tomar conciencia’ para mejorarlas y mejorarnos.
“Así a fines de 2001, nos estructuramos en el entonces MST, aprendiendo mucho sin duda acerca del ‘Qué hacer’, aunque el análisis posterior, nos mostró ‘qué no hacer’…
“Desde sus inicios, integramos el MIC, teniendo la oportunidad de experimentar tanto sus ambiciones oportunistas, como sus políticas, a nuestro entender desviadas (más que clasista, de conciliación de clase), ya que no es precisamente aliándose con la burocracia que se llega a las bases, aunque se pretenda ‘cavar trincheras’ en ellas. Bueno… ‘un paso adelante, dos pasos atrás…’, algo que sucede en la vida de los individuos; en la historia de las naciones y en el desarrollo de los partidos…
“Y aquí por cierto tenemos que agradecer a los compañeros del PO que nos mostraron siempre la política correcta, aplicada en el momento y el lugar oportuno, y confiaron en nosotros y nos apoyaron en todo momento.
“Todo esto nos permitió reaccionar a tiempo, y despojados de todo prurito, sectario u oportunista, reconocer en el PO al partido revolucionario, anti-imperialista, anti-burocrático y no conciliador de clases.
“Asimismo hemos comprobado, con gran alegría, que gran cantidad de compañeros con los que compartimos luchas, encuentros y organizaciones, hoy se están acercando a este partido y no dudamos que otros lo harán en breve. Todos con el mismo objetivo: la construcción del partido revolucionario.
“Nosotros ya hicimos la experiencia de luchar por la unidad y lo seguiremos intentado. Vivimos muchas ‘unidades’ que sólo duraron el tiempo que dura la campaña electoral. Esa unidad no sirve de nada, únicamente para sacar algún voto más (cada vez menos). Siempre tuvimos la clara convicción que nos debía unir un programa clasista y revolucionario. Que no lo debíamos disfrazar de nacionalista ni hacer concesiones para unirse a cualquier otro, para engañar a la gente y hacer engordar al partido, y no crecer. No escribir y decir lo que a la gente le gusta o quiere oír, sino aquello que la clase necesita y debe entender.
“Es en ese sentido que los sindicatos si bien son un valioso auxiliar del movimiento revolucionario no pueden constituir la dirección revolucionaria que catapulte a los explotados al poder.
“Como lo dijera Lenin, ‘sin teoría revolucionaria no hay práctica revolucionaria’, por ello es que hemos decidido nuestro ingreso al partido, ya que a nuestro entender tiene esta visión y ese alcance.
