Partido

3/5/2018|1500

Prensa Obrera, del mimeógrafo a WhatsApp

prensaobrera.com, el inicio de una nueva etapa

Desde hace dos años, la comunicación del Partido Obrero transita una verdadera revolución.


Como saben nuestros lectores, Prensa Obrera ha crecido exponencialmente en Internet. Una década atrás, celebrábamos el progreso que significó la venta de diez mil ejemplares del número mil de nuestro periódico. Actualmente, ingresan a nuestra página web más de veinte mil lectores por día, y la tendencia es creciente. Desde 2016 a esta parte, hemos duplicado año a año el tráfico a nuestra página.


Prensa Obrera  se nutre a diario de la corresponsalía de luchadores y luchadoras de todos los rincones del país. Estos, a su vez, demandan una respuesta cada vez más inmediata. Muchas veces, esos artículos son preparatorios de una asamblea, de una acción de lucha o corresponden al balance de una huelga. Circulan rápidamente por las redes sociales y a través de grupos y listas de difusión que vinculan con el activismo. Los teléfonos celulares se han convertido en instrumentos de lucha política, tanto para la difusión como para el registro de denuncias y coberturas. Hemos innovado con el despacho vespertino a diario de los artículos más destacados de la jornada a través de WhatsApp, que algunos miles de nuestros lectores reciben en sus teléfonos.


También hemos inaugurado una nueva época respecto a la cobertura audiovisual de marchas y actos, con informes sintéticos que recogen el testimonio de los protagonistas de las luchas, más el apoyo de un nutrido equipo de fotógrafos militantes. Incorporamos las transmisiones en vivo, que en las próximas semanas mejoraremos sustancialmente.


No hace falta mencionar, además, la enorme proyección que todo esto brinda al trabajo internacional del Partido Obrero. La colaboración e intercambio con publicaciones y organizaciones revolucionarias de todo el mundo es cada vez más intensa. El lector atento notará la presencia cada vez mayor de artículos traducidos al inglés, francés, portugués e italiano.


A la par de esto, estamos restaurando el archivo completo de Política Obrera y Prensa Obrera, para que esté completamente disponible a través de nuestra página.


A partir de hoy, además, presentamos un diseño renovado de nuestra página, que pasa a denominarse PrensaObrera.com, y un nuevo sitio institucional del Partido Obrero.


Este progreso, sin embargo, representa los primeros pasos. En los próximos meses avanzaremos en una renovación tecnológica integral de la página y en el rediseño de nuestra redacción, para hacerla más ágil y eficaz de cara a los nuevos desafíos.


Pero de los primeros volantes mimeografiados de Política Obrera a la difusión por WhatsApp; de aquellas publicaciones iniciales de confección casi artesanal de principios de los años ’60 a la presente explosión de las redes sociales; de aquellos pioneros registros en VHS que circulaban de mano en mano a nuestro propio canal de YouTube, existe un vínculo de hierro.


Prensa Obrera  continúa siendo una publicación de partido, asociada a una construcción política metódica y programáticamente definida. “Y con una fisonomía bien precisa: un periódico clasista, al servicio de los intereses históricos del proletariado”, como decía el editorial de su primer número, aparecido en diciembre de 1982, aún bajo la dictadura, cuya tapa convocaba a los trabajadores a “noquearla”. La nueva publicación reivindicaba, a su vez, su continuidad con respecto a su antecesora, Política Obrera, que no había dejado de circular de manera clandestina aún bajo el terror videliano. El nuevo periódico, Prensa Obrera, continuaba diciendo aquel texto, “no inaugura nuestra lucha política clasista y socialista. Es apenas una nueva modalidad que se incorpora a esa lucha, en el sentido de poner en pie un periódico que tenga un alcance de masas”.


Estamos dando nuevos pasos en ese sentido, apoyados en una historia de cinco décadas de lucha revolucionaria. Nuestro lema continúa siendo “Por un partido obrero”. Una continuidad que no puede reivindicar ninguna otra publicación de izquierda de nuestro país y muy pocas, seguramente, en todo el mundo.