Partido

21/10/2019

Un homenaje obrero y socialista a Mariano Ferreyra

Emotivo acto a 9 años de su asesinato

Foto: Ojo Obrero Fotografía

La esquina de Luján y Pedriel, en el barrio porteño de Barracas, volvió a convertirse, nueve años después de aquel mediodía en que fue asesinado Mariano Ferreyra, en el escenario de un acto político, de una tribuna de clase, erigida para denunciar nuevamente ese crimen de Estado contra la clase obrera y levantar bien alto las banderas de su lucha.


El rostro de Mariano, hoy emblema de la lucha de toda una generación de jóvenes trabajadores, posaba retratado en el mural que sirvió de fondo del acto al que asistieron cientos de compañeros, con una notoria mayoría de jóvenes.  En el comienzo se recordó que ese día cumpliría años Rubén Schofrin, histórico luchador clasista del gremio de prensa y militante del PO, fallecido meses atrás, quien “pasó sus últimos 8 cumpleaños peleando por esta causa”. Fue ovacionada la presencia de Elsa Rodríguez, la inquebrantable compañera del Polo Obrero que también fue víctima del ataque de la patota criminal de Pedraza y la burocracia sindical ferroviaria.


El primero en tomar la palabra fue Marcelo Mache, compañero de Mariano en aquel momento en la Unión de Juventudes por el Socialismo, y dirigente del PO de la Zona Sur. En su intervención, empezó recordando que Mariano militaba desde muy chico, que ya a los 14 años estaba acompañando la ocupación de Sasetru en Avellaneda. “Era una militancia todo terreno: con los desocupados del Polo Obrero, con la Fuba piquetera, fue un constructor de la UJS en Berazategui. Lo hacía con abnegación. Puso el cuerpo en las asambleas de los ferroviarios, en los cortes de vías en junio y luego en octubre, en la noche previa de aquel 20 de octubre pintó la bandera con los reclamos de los tercerizados, luego estuvo al frente defendiendo a sus compañeros del ataque de la patota asesina. Esa era su militancia. Mariano Ferreyra es el Partido Obrero, y el Partido Obrero es Mariano Ferreyra, que con abnegación afronta los desafíos y las tareas que tiene por delante”.



Luego pasó al frente Jorge Hospital, dirigente de la agrupación Causa Ferroviaria – Mariano Ferreyra, que lideró el Frente Unidad Ferroviaria que recogió una enorme votación en las últimas elecciones de delegados de la Línea Roca. “Para un ferroviario hablar en estos actos plantea el desafío de rendir cuentas de la continuidad de la lucha por expulsar a la burocracia pedracista, que hoy comanda Sergio Sasia, un delfín de José Pedraza. Nosotros empezamos el año peleando junto a los tercerizados de MCM, que fueron despedidos cuando elegían delegados y se organizaban contra la arbitrariedad patronal”.


Luego de relatar las iniciativas con que la Lista Gris se encuentra organizando la pelea por los reclamos en el ferrocarril, denunció el operativo que se trama desde el Instituto Patria para recomponer a la burocracia sindical en la Línea Roca, incorporando un listado de gente en el que figura Alcorcel, uno de los integrantes de la patota. Cuestionó también que Fernández sondea a Randazzo para que ocupe el Ministerio de Transporte, es decir a quien responsabilizó a los trabajadores por la Masacre de Once. “Este es el contenido del pacto social, con el que buscan maniatar a la clase obrera ante el ajuste salarial, los despidos y la flexibilización laboral -como la que pactaron Sasia y el macrismo con la reforma del convenio ferroviario. Pero en la base de los trabajadores persiste un repudio a la burocracia sindical, y en este acto levantamos la bandera de la expulsión de la burocracia de los sindicatos y de la puesta en pie de una nueva dirección clasista”.



Eduardo Belliboni, dirigente nacional del Polo Obrero, quien estuvo presente aquel 20 de octubre de 2010, siguió en el uso de la palabra. “Estamos en las vísperas de un nuevo gobierno peronista, como el que tuvo una política represiva cuando cayó Mariano. Un gobierno que además de las fuerzas estatales recurrió a las patotas, a la tercerización de la represión, como la que ahora vemos cuando el gobernador Arcioni de Chubut manda a la patota del gremio de petroleros contra los piquetes”. Resaltó que “en septiembre de 2010, un mes antes del crimen de Mariano, los trabajadores del Hospital Francés que enfrentaban despidos sufrieron el ataque de una patota sindical comandada por un ladero de Alberto Fernández. Una semana después el compañero Walter de Kimberly Clark, hoy ocupada por sus trabajadores, recibió un atentado en su casa con una bomba molotov. Que no nos vengan a contar que el kirchnerismo no reprimía. ¡Tenemos que preparar a los trabajadores, porque este pacto social solo pasa con represión, y nosotros no lo vamos a dejar pasar!”



El saludo final estuvo a cargo de Néstor Pitrola, dirigente del PO y candidato a diputado nacional por el Frente de Izquierda – Unidad. Reflexionó que “la figura de Mariano tiene una vinculación con los mártires del Cordobazo, como Santiago Pampillón y Máximo Mena, que eran obreros y estudiantes que cayeron en la lucha obrero-estudiantil y se convirtieron en el símbolo de una etapa. Mariano Ferreyra, como ellos, marcó una época porque mostró a la juventud las situaciones íntimas que pintan de cuerpo entero al nacionalismo burgués: su defensa de las privatizaciones, la tercerización de la represión en las patotas, el territorio liberado por la policía, la corrupción de la justicia y la impunidad para los responsables políticos del gobierno y el Estado en el crimen. Una lucha de masas que marcó un campo político de independencia mostrando la verdadera cara del kirchnerismo”.


“Pero también marcó el carácter del Partido Obrero, lo puso a prueba. Reaccionamos con un planteo político y cerramos filas como un partido de combate, para enfrentar a nuestros enemigos de clase. El frente único de clase fue el emblema en la lucha de Mariano: la unidad entre ocupados y desocupados, la unidad con los estudiantes, el PO organizando la lucha. Es la misma ruta que seguimos en estos días ante el agravamiento de la crisis y de los golpes contra los trabajadores: las movilizaciones del sindicalismo combativo y el frente de lucha piquetero, el Plenario del Sindicalismo Combativo y el Encuentro de Pilar. Así preparamos a los trabajadores y a la juventud para la etapa que se viene, luchando, pero también con una tenaz campaña electoral, por un voto de independencia de clase”, enfatizó Pitrola.



Al finalizar, agregó que “ahora asoma una nueva etapa de la lucha de clases en América Latina, con rebeliones como las de Chile, Ecuador y Nicaragua. La lucha de Mariano fue en un momento de ascenso del nacionalismo, pero ahora vamos a enfrentar a esta coalición conservadora de los Fernández y Massa que viene a aplicar el pacto social, la otra cara de los ajustes fondomonetaristas que son enfrentados por los trabajadores en Chile, Ecuador y Nicaragua. Se acercan momentos que pondrán a prueba al Partido Obrero, y nos preparamos levantando estas banderas de la juventud militante que lucha por el gobierno de los trabajadores y la unidad socialista de América Latina, que son las banderas de Mariano Ferreyra”.