Contra la policía de gatillo fácil

El Estado policial de Duhalde está dejando como saldo cientos de jóvenes asesinados.


Prácticamente no existe barriada del Gran Buenos Aires que se salve. Durante el mes de febrero de 1996 se conocieron 9 casos.


Uno de ellos fue Néstor Zubarán, de veinticinco años, vecino de William Morris, Hurlingham, que por salir a comprar cigarrillos y pedir fuego fue asesinado por la espalda por Alberto Martínez, un policía chofer del jefe de la Federal.


A pesar de haberse comprobado que la bala de 9 mm salió de su arma, este policía fue dejado en libertad “por falta de mérito”.


Los familiares y vecinos de Héctor, junto con abogados de Derechos Humanos, han realizado las denuncias por el asesinato, reclamando cárcel, juicio y ahora también perpetua para Martínez.


El 29 de marzo se realizó una movilización y se programa otra para el 24/4.


Han comenzado a acercarse a la casa de Héctor otros familiares víctimas de la represión, centros de estudiantes y el sábado habrá una importante asamblea en el domicilio para resolver los detalles organizativos de la movilización. Es una oportunidad para que los Centros de estudiantes y los jóvenes de la zona discutan también su presencia en la Marcha por los 5 años del asesinato de Wálter Bulacio, que se hará en Congreso el próximo 19.


Además, para el 20 de abril, los vecinos de Hurlingham por los Derechos Humanos convocan a Talleres para analizar la violencia policial, para jóvenes estudiantes y trabajadores.


La violencia ejercida por el Estado contra los trabajadores y la juventud ha generado una respuesta implacable por parte de las víctimas. La organización de Comisiones contra la violencia policial y contra la represión, las incesantes marchas cada vez que aparece un caso, lo demuestran.