El “Nuevo MAS” convocó a su acto del 1° de Mayo en la puerta de una fábrica que, lógicamente, ese día no trabajaba, perdida en un barrio interno, sin movimiento, de la localidad de San Fernando, en el norte del Gran Buenos Aires. Dicho acto se colocó en oposición al que había convocado el Frente de Izquierda (“1° de Mayo de los trabajadores y la izquierda”) en Plaza de Mayo, con un claro programa de lucha y de alternativa política obrera y socialista.

El “Nuevo MAS” justificó la realización de su actividad perdida en que el Frente de Izquierda habría preferido “dar continuidad a su orientación electoralista y hacer un acto autorreferencial” (29/4).

Ridículo. La crisis ha llevado a una disgregación política de las fuerzas burguesas convocando elecciones anticipadas en numerosas provincias y municipios. Todos los fines de semana hay por lo menos un par de elecciones que van delineando el panorama político-electoral del país hacia la elección general.

El propio “Nuevo MAS”, en el editorial de su periódico, días antes de la debacle de sus listas marginales en Capital y Neuquén (23/4), señalaba: “La coyuntura política está signada por el calendario electoral”.

¿En qué quedamos?

A pesar de este reconocimiento de la realidad, el “Nuevo MAS” insiste en enfrentar al Frente de Izquierda y autoproclamarse como constructor de una alternativa socialista.

Pero es el Frente de Izquierda el que libra la lucha por concentrar el voto obrero, de la juventud y los sectores combativos de las masas en una alternativa de izquierda y socialista, contra las candidaturas burguesas. El Frente de Izquierda es un frente de tres partidos políticos que se reclaman trotskistas y ha recibido la adhesión e integración a sus listas de otros referentes que se reclaman maoístas, chavistas, guevaristas, etc., y dicen coincidir con su plataforma. Igual que numerosos dirigentes y activistas sin partido.

¿De qué autoreferencialismo habla la dirección del MAS que decidió no apoyar al Frente de Izquierda para presentar su lista? Y que lo hizo por problemas de cartel de candidaturas. ¡Eso sí que es autoreferencialismo y electoralismo!

El Frente de Izquierda se ha consolidado como la única referencia de un polo de izquierda -desplazando divisionistas candidaturas sectarias y oportunistas de la izquierda- con un definido programa socialista revolucionario contra los partidos burgueses y la política de polarización que promueven el gobierno y la burguesía en el terreno electoral. Tercera fuerza en Salta y Mendoza. Superó el fraude en Santa Fe y pasó las Paso. Cuarta fuerza en Capital. Dos nuevos diputados en Neuquén y concejales en zonas obreras. Ahora segundo en la ciudad de Mendoza.

Sólo anteojeras sectarias impiden ver esta realidad a la dirección del MAS.

Antes que salieran los resultados del domingo 26 de abril, que consagran esta tendencia al ascenso de la izquierda clasista y socialista, el MAS había convocado su acto del 1° de Mayo, separado y en el extremo de la marginalidad política.

“Todos a Fate por un 1° de Mayo obrero y socialista” decía. (¿Todos?). Se colocó así de espaldas al gran acto del 1° de Mayo que el Frente de Izquierda realizó en Plaza de Mayo, frente al poder político, compitiendo contra las alternativas de poder que levanta la burguesía.

¿Cola de ratón o apoyar la creación de una real alternativa política obrera y socialista?

La lucha por la independencia política de la clase obrera y los explotados tiene un canal real en el Frente de Izquierda.