2/12/2004|879

4.000 personas pasaron por el Felco


El sábado 27 en el cine Tita Merello, culminaba el Felco ante más de 150 personas con la lectura de una declaración, con las calurosas palabras de los realizadores de EEUU, Corea y Bolivia (que anunciaron la intención de realizar el Felco, en octubre de 2005 en la ciudad de El Alto), y los interminables aplausos después de la proyección de “Cuarta Guerra Mundial”. Quedaba la sensación y convicción de haber culminado exitosamente un trabajo de meses con un gran evento político-cultural que, sin dudas, dará que hablar en la Argentina y en muchos otros países. Una sensación que se percibía desde el comienzo. Todas las proyecciones y mesas programadas se cumplían a rajatablas y a sala llena (hechos que sorprendieron a más de un funcionario). En total fueron alrededor de 4.000 personas las que pasaron por esta primera edición del Felco en Buenos Aires. Más adelante, sumaremos también los datos de las proyecciones simultáneas en varias provincias del país.


 


El miércoles 24 en el Palais de Glace, durante la segunda parte de la retrospectiva de Raymundo Gleyzer, todos nos vimos sorprendidos y emocionados al ver a un Victor Proncet (co-guionista y actor que encarnó al burócrata Barrera en “Los Traidores”), canoso y con 30 años más, pero con la misma fortaleza ideológica y humana de aquellos tiempos. De muy buen humor y contando sus anécdotas y reflexiones a quien quisiera escuchar, posando para decenas de fotos y, por supuesto, saludando calurosamente la iniciativa del Felco. También disculpándose… “Estoy viejo y cansado, y ahora no me puedo quedar, pero cuenten conmigo que tengo muchas cosas para contar”, y prometiendo su presencia para una próxima proyección y debate con el film “Raymundo”. En ese momento dábamos comienzo, ante una nutrida y motivada concurrencia, a la mesa-debate con realizadores de cine militante, con la presencia de Ojo Obrero, el grupo Alavío, Rodrigo (Indymedia video), Virna y Ernesto (directores de “Raymundo”), Gabriel Corvi (realizador del film “Errepe”), Carlos Pronzato (Brasil), Steve Zeltzer (EEUU) y Mj. Kim (Corea).


 


El jueves 25, primer día en el Tita Merello y arrancando al mediodía, los nervios y miedos a la sala vacía se esfumaron rápidamente cuando, desde 15 minutos antes, comenzó a agruparse gente en la puerta del cine, aún cerrado. Los afiches del Felco pegados en las avenidas y principalmente frente a los cines de la ciudad, la docena de entrevistas radiales realizadas por distintos compañeros del Ojo Obrero, y la nota de casi una página publicada el mismo jueves en el diario Página/12, dieron a este pionero evento cultural-militante una importante difusión y trascendencia. Ya estaba cantada la tendencia y durante los tres días de la muestra central, la Sala 2 del “Tita” superó ampliamente en público a las otras dos salas del complejo, en una de las cuales estaba la película “Deuda”, de Lanata. Treinta producciones de siete países latinoamericanos, sin respiro, ocho horas diarias y durante tres días, fueron una elocuente muestra de la lucha de los pueblos latinoamericanos contra esa “Deuda” y por terminar con la barbarie capitalista que los Lanatas insisten “odiosamente” en reconstruir y redistribuir con los mismos viejos métodos, fracasados cientos de veces.


 


Notas aparte merecen las tres mesas redondas realizadas con destacadas organizaciones y personalidades en los paneles, el entusiasmo y la fuerte convicción política con que llegaron los compañeros de Bolivia, luego de viajar por casi tres días. También un capítulo aparte para la excelente relación que entablamos con proyectoristas y acomodadores, y la invalorable colaboración recibida. La presencia de los compañeros del Grupo de Acción Fotográfica con su muestra, de los compañeros de LuchArte, de artistas plásticos que montaron sus obras, de los compañeros del programa “Giro a la Izquierda” de FM La Tribu, con su mesa y materiales, la mesa y presencia durante toda la semana de Razón y Revolución, y el apoyo de la revista “Barcelona”, que publicó un aviso y envió revistas para repartir gratuitamente, todo esto en el hall del primer piso del Tita, realmente era impresionante. Por último, felicitar a los compañeros del Ojo Obrero y a todos los que de mil maneras distintas colaboraron con este gran Festival de la Clase Obrera. Como dice el compañero Steve Zeltzer, ¡Larga vida al Felco!