Este 24 de Marzo se realizó, con medio centenar de compañeros, un acto en la plaza del pueblo, en el que participaron, entre otros, el cura párroco Luis Bicego, la comisión de DDHH de la localidad, ATE y organizaciones de izquierda.

 

El acto se da en el marco de la gran rebelión que conmociona a la provincia. Mientras el gobierno de Kirchner monta una fantochada en el intento de convertir los derechos humanos en piezas de museo, en su provincia no sólo se cansa de violarlos, y los trabajadores le están sacando la careta. La iniciativa de lucha de los trabajadores no deja de estallarle en la cara. En la localidad, el jueves 22 se realizó una marcha por la cuestión del agua (puesto que no sólo no tienen agua corriente, sino que se ha padecido, durante estos meses, cortes de agua por 5 ó 6 días), que reunió a más de 500 personas.

 

Se coloca nuevamente en el tapete para quién gobierna K, que no ha tenido dificultad en votar la construcción de un dique que llevará agua potable y en abundancia para recuperación secundaria, tal como exigen las operadoras petroleras, y en utilizar métodos de la dictadura, desde los atentados hasta los presos políticos, para presionar y extorsionar a los trabajadores de la provincia.

 

Otro párrafo merece la posición adoptada desde las lejanías de la Patagonia por el MST, que ha pugnado en el país por sumar al acto convocado por el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia a sectores kirchneristas, renunciando así a la denuncia del responsable máximo de la instalación de un estado de sitio con gendarmería en Santa Cruz, de tener los sueldos congelados, de que los compañeros continúen detenidos. En la localidad se ha tenido que guardar cualquier intentona de éstas, porque justamente es la lucha contra este gobierno y estas políticas la que están llevando los trabajadores en la provincia.

 

Llamamos a los trabajadores a desarrollar y reforzar una alternativa política de los trabajadores para reorganizar la provincia sobre nuevas bases, sobre bases socialistas, en Las Heras y toda Santa Cruz.