Políticas

7/11/1995|472

“A Massaccesi la cárcel ya, a Verani la huelga general”

La primera semana de octubre las calles de General Roca, Viedma, Villa Regina y Cipolletti fueron escenario de duros enfrentamientos entre miles de manifestante, mayoritariamente estatales, y las fuerzas represivas.


En la generalidad de los casos los enfrentamientos se suscitaron por la abierta provocación de las fuerzas de gendarmería que, siguiendo órdenes expresas del gobierno provincial, desataron una brutal represión para intentar quebrar por la fuerza un movimiento que día a día crecía en masividad.


Es que la tónica de las últimas movilizaciones muestra la paulatina, pero persistente entrada en escena de nutridos contingentes juveniles, estudiantiles y barriales, de los desocupados y de los trabajadores de la actividad privada… ¡una verdadera ‘pueblada’! Luego de estas jornadas de resistencia popular, en General Roca y en Viedma (centros de las principales movilizaciones) se vivió un virtual ‘estado de sitio’, con la gendarmería patoteando a la población y actuando como un virtual ejército de ocupación (requisas de autos y personas en los accesos a la ciudad y en los puentes sobre el canal grande que separa el casco céntrico de las barriadas más populosas).


Pese al apriete general y a las amedrentadoras declaraciones del jefe de Gendarmería que prometía una ‘represión ejemplarizadora’ apenas ‘volase la primera piedra’, 2.500 personas nos juntamos para manifestar el pasado 12/10 … para encontrarnos con que el F.E.R. y la Multisectorial, estaban más preocupados en hacer ‘seguridad interior’ que en dirigir la protesta a los centros de poder político. Es así que la movilización partió, NO hacia el centro de la ciudad, sino hacia las afueras … nos llevaron a un ‘pic-nic’, como protestaban numerosos estatales… Al llegar a la entrada de la ciudad, los dirigentes del F.E.R. anunciaron la desconcentración en medio de una atronadora silbatina y gruesas puteadas de la gente que sintió que le habían tomado el pelo.


El pasado sábado 21/10, se realizó en Roca el Congreso Regional de Delegados del CTA (abarcaba Río Negro y Neuquén) para tratar, en forma especial, las crisis provinciales y la situación rionegrina en particular. Ante el reclamo de delegados de base de que la situación rionegrina exigía, por parte del CTA, una acción decidida y un plan de lucha provincial por el conjunto de las reivindicaciones del movimiento trabajador, la dirección ceteísta (Fuentes-ATE Neuquén; Gómez-UNTER Río Negro; Judiciales, etc.) respondió que “no nos debemos dejar arrastrar por la dialéctica de la lucha de clases”; “la lucha de los trabajadores solos (!?) no alcanza para revertir el modelo neo-liberal”; “debemos construir un movimiento policlasista sumando nuevos sectores”, para concluir en que la única ‘salida’ es convocar un Congreso del Trabajo, la Cultura y la Producción … junto al conjunto de las Cámaras patronales de la región (las ‘economías regionales’) Las multisectoriales que se han conformado en cada localidad, y partidos como el Ptp, están totalmente sumados a esta perspectiva.


Luego de la ‘marcha pic-nic”  del 12/10, el F.E.R. abrió una nueva ‘tregua’ al gobierno, aprovechando la descompresión de la situación salarial al entrar parte del dinero adelantado por Nación ante el acuerdo provincial de privatizar la Empresa de Energía (ERSE) y el Banco, lo que permitió el pago de los sueldos de agosto y el comienzo del organigrama de pagos de setiembre. Rápidamente el gobierno ‘registró’ esa tregua y anunció el debut de los ‘bonos’ para el pago de los sueldos de octubre, el medio aguinaldo adeudado y las deudas previsionales (a algunos jubilados se les debe desde marzo).


Ante este nuevo atropello el  F.E.R. se debate entre la fractura y la parálisis; UPCN, el gremio mayoritario, ha planteado que el “acuerdo del  F.E.R. era únicamente en relación al atraso salarial, por lo que superado éste (¡ya lo dan por superado!) cada gremio queda en libertad de acción”. Los gremios del CTA, por su parte, siguen sin reaccionar. Pero la calma que se adueñó de las calles rionegrinas estas dos últimas semanas, es una calma que preanuncia la tormenta. La actitud conciliadora y derrotista de las direcciones contrasta con la disposición de lucha de los trabajadores. Una reciente movilización en General Roca, la primera en la provincia en 10 días, congregó más de 1.000 personas, pese a que la convocatoria de la Multisectorial fue casi en secreto, y que su consigna central: NO A MASSACCESI SENADOR, desplazaba el tema salarial y el ajuste a un plano subordinado. La marcha se caracterizó por una gran disposición de lucha de los participantes, y la voluntad de los trabajadores de no dejar pasar el ajuste fue expresada claramente en la consigna más coreada de la misma.


“OLE, OLE, OLE, OLA… A MASSACCESI LA CARCEL YA … A PABLO VERANI LA HUELGA GENERAL”