La movilización del 12 de noviembre, que reunió a 2.000 trabajadores de la salud frente a la Jefatura de Gobierno, concluyó con una iniciativa: concretar, a un año de la asunción del gobierno “PRO”, una marcha de todos los sectores de trabajadores y jóvenes afectados por la ofensiva de Macri. Así lo acordaron la Interhospitalaria, el Frente de Recuperación gremial de médicos municipales y el movimiento de Profesionales en Formación -residentes y concurrentes-, luego de la marcha que reunió a médicos, técnicos, psicólogos, enfermeros, de varios hospitales de la Ciudad y estudiantes de Medicina.

En varios plenarios posteriores en el Hospital Gutiérrez, a los que se agregaron centros de estudiantes, agrupaciones docentes y universitarias y otros sectores, se viene librando un debate acerca del carácter de la convocatoria, prevista para el 10 u 11 de diciembre.

La noticia de que la CTA estaba organizando una convocatoria antimacrista para la misma fecha, alentó la expectativa de una acción común de trabajadores de la ciudad, con gremios estatales y docentes.

Con el correr de los días, el panorama se fue aclarando. La CTA entregó la iniciativa de su marcha a la (mal llamada) “Multisectorial”, en verdad, netamente kirchnerista. Con la excusa de una acción antimacrista, preparan un acto de apoyo al gobierno nacional. Esta política ya se vivió en una marcha realizada en octubre, cuando los huelguistas docentes de UTE y sectores de ATE Capital fueron llevados de las narices detrás de las banderas y los oradores de sectores punteriles barriales pro-K, que incluso físicamente encabezaban la marcha y ocupaban el palco. En aquel momento, distintos activistas docentes y estatales rechazaron ese copamiento.

La CTA no se pronunció por la iniciativa de la Interhospitalaria. En cambio, está actuando como intermediaria entre ésta y la multisectorial. Los “K” y los representantes capitalinos de De Genaro ni siquiera se han molestado en poner en debate una deliberación para debatir como sería una convocatoria común. En cambio, pretenden que los sectores independientes que se agrupan con la Interhospitalaria se “sumen” o “participen” de la convocatoria kirchnerista.

Como ya lo probó, la victoria de Macri contra los docentes, de la mano de Kirchner es imposible derrotar a Macri. Del otro lado del Riachuelo se desarrolla la misma política de agresión contra los trabajadores estatales.

La posición del Partido Obrero defiende el carácter independiente de la marcha surgida de la gran movilización de la Salud del 12 de noviembre que se continuó con los plenarios del Hospital Gutiérrez. Sólo así se podrá derrotar la escalada macrista.