Políticas

7/12/2011|1206

A un año del Parque Indoamericano

Al cumplirse el primer aniversario de la ocupación del Parque Indoamericano, la investigación para determinar los responsables políticos y materiales del asesinato de las tres víctimas fatales y las decenas de heridos está en foja cero. A pesar de que el operativo represivo se vio en directo por TV, lo mismo que la zona liberada para que actúen patotas xenófobas vinculadas con la burocracia sindical, no hay detenidos ni tampoco procesados. Recién ahora -y ante la certeza de que el aniversario hará que el tema ocupe un lugar en los medios- el fiscal pidió la “imputación”, no el procesamiento, de algunos policías. Sobre las responsabilidades políticas, nada de nada.

La inacción judicial tiene una explicación: la represión en el Indoamericano comenzó y terminó involucrando a los gobiernos nacional y de la Ciudad, junto a sus fuerzas represivas. La represión inicial fue llevada a cabo por la Policía Federal y su hermana menor, la Metropolitana. La zona liberada fue armada, también, por estas dos fuerzas. El desalojo final quedó en manos de la Gendarmería. ¿Qué juez en este país está dispuesto a ir contra los K y Macri?

Un plan de viviendas del que nadie habla

A la impunidad, hay que agregarle algo que no es menor: del plan de viviendas anunciado a las apuradas por Aníbal Fernández y Rodríguez Larreta no se ha visto ni un ladrillo. En aquel momento, el gobierno nacional prometió poner un peso por cada peso que pusiera el gobierno de la Ciudad. Como estaba claro que Macri no pondría un centavo, el gobierno nacional terminó haciendo lo propio. Las únicas obras en la zona siguen siendo las del obrador de las Madres, que como todos saben estuvo manejado por Shocklender -quien, además, fue el primero en reclamar la represión contra los ocupantes cuando todavía era un niño mimado del gobierno y de la propia Hebe. Las casas en construcción son unas pocas, frente a necesidades de viviendas que se cuentan por miles. Pasado un año, el Presupuesto aprobado por el gobierno de la Ciudad, y que contó con el voto favorable de la bancada K, no destina fondos para la construcción de viviendas sociales de acuerdo a las necesidades existentes.

Especulación inmobiliaria

La orientación social a favor de la especulación inmobiliaria, que llevó a la crisis del Parque Indoamericano, se ha profundizado. Los anuncios del gobierno de Macri para su segundo mandato van en esa dirección. El traslado del edificio de la municipalidad y de sus ministerios al barrio de Barracas, a expensas de las tierras del Borda, apunta a generar un polo de construcción en la zona, que llevará a un encarecimiento del precio de las viviendas y de los alquileres.

¿Hay divergencias de peso entre el kirchnerismo y el macrismo? Hace sólo unos días la presidenta estuvo en la Cámara de la Construcción y llamó a “invertir en ladrillos”, colocándose del lado de los especuladores de la construcción. Incluso les prometió una nueva ley de ART, para terminar con la “industria del juicio”, cuando es claro que en la construcción es donde ocurren la mayor cantidad de accidentes laborales

Balance político

El gran beneficiario de la crisis política provocada por la ocupación del parque fue el macrismo, que forzó al kirchnerismo a un frente único contra los ocupantes. El macrismo explotó las vacilaciones del gobierno nacional, ganándose para sí el apoyo de un sector de trabajadores de la zona que temieron que los ocupantes avancen hacia sus precarias propiedades. El kirchnerismo se quedó con las manos vacías: al no resolver ningún problema popular mostró su verdadero carácter conservador. En buena medida, el resultado que arrojó la crisis del Indoamericano anticipó el triunfo del macrismo en las elecciones de la Ciudad.

El movimiento de lucha que se movilizó en apoyo de los ocupantes sufrió un retroceso. En las elecciones de las juntas villeras de la zona el sector combativo perdió posiciones (especialmente en la Villa 20). La ocupación, que fue incentivada por punteros y culminó en desbandada, nunca logró el apoyo de los habitantes de las villas -mucho menos de los barrios aledaños. Los punteros de los partidos patronales reforzaron su dominación.

El aniversario de la ocupación del Parque Indoamericano le plantea al movimiento de lucha de la vivienda un balance de esa lucha y la necesidad de darse un programa frente a la crisis habitacional de la Ciudad, en oposición a todos los bloques capitalistas. Este programa tiene que partir de disponer las tierras públicas para la construcción de viviendas sociales, la urbanización de las villas, la construcción de 5.000 viviendas por año como mínimo, financiadas por un impuesto especial al capital inmobiliario, créditos hipotecarios a tasa cero, el control vecinal de las construcciones y un plan de centros deportivos y plazas. Sobre esta base, está planteada la expulsión de la red de punteros de los barrios y la recuperación de las juntas vecinales y cuerpos de delegados para una lucha en serio por la vivienda popular.