El pueblo de Pilar pudo escuchar la otra campana sobre lo que está ocurriendo en Parmalat. Hasta ahora, la única campana era la de Taselli, que divulgaba la especie de que en Parmalat “no había conflicto” y que “se venía trabajando normalmente”.

 

El apacible ritmo de Pilar, un sábado a la tarde, fue alterado por la presencia de los trabajadores de Parmalat Carapachay, quienes realizaron un acto público en la plaza principal de la localidad. Esta iniciativa logró quebrar el cerco informativo. Los principales medios locales de televisión y radio se hicieron presentes en el acto y, en las entrevistas, los delegados desmintieron los dichos de la patronal y del sindicato y explicaron con lujo de detalles el vaciamiento que se está operando y el ataque que se viene perpetrando sobre los trabajadores.

 

La realización del acto no pasó desapercibida en la planta de Pilar, hasta el punto tal de que uno de sus delegados , quienes vienen actuando de laderos de la conducción de Atilra, tuvo que salir a descalificar el acto por los medios, reproduciendo las patrañas de la patronal. En la base de la planta de Pilar existe una inquietud que puede activarse en cualquier momento. Y eso lo saben mejor que nadie los delegados que han terminado encolumnándose con la burocracia.

 

El acto contó con la presencia de numerosas delegaciones del movimiento obrero, de las organizaciones piqueteras y partidos de izquierda, las que hicieron uso de la palabra en apoyo a la lucha de Parmalat: Lafsa, Transporte del Oeste, Pepsico, ATE Pilar, Hospital de General Sarmiento, el Polo Obrero de la localidad de Pilar, y partidos de izquierda.

 

Cada una de las intervenciones fue acompañada por loas, cánticos y batucadas que con gran entusiasmo y sin solución de continuidad improvisaron los compañeros de Carapachay.

 

El acto fue un gran acierto. Adelante, compañeros de Parmalat.