El PRO, Unen y el Frente por la Victoria se han puesto de acuerdo para protagonizar un debate público de los candidatos respectivos por la Ciudad, del cual han excluido al Frente de Izquierda y los Trabajadores. ¿Es razonable, es democrática esta exclusión?

Hemos escuchado decir, en más de una ocasión, a conspicuos dirigentes de los agrupamientos que han convenido el debate, que más allá de las divergencias consideraban muy positivo que la izquierda de Argentina ingresara al Congreso Nacional. Que consideraban necesaria esa participación en el parlamento nacional para profundizar el debate sobre los problemas fundamentales que aquejan al país. Pareciera, sin embargo, que del dicho al hecho hay un trecho considerable, o que es más fácil decir que hacer. Sea como fuere, deberíamos estar en ese debate por nuestros propios méritos. Estamos entre los actores más destacados de la vida y de la lucha social -sindicatos, empresas, colegios, movimientos culturales, universidades, movimientos de derechos humanos. Basta hojear un diario o sintonizar un noticiero para encontrar, en cualquier momento, que la mención a nuestro frente o a las fuerzas que lo integramos esté presente.

¿Hace falta decir que el ascenso electoral del Frente de Izquierda, en la totalidad de los 18 distritos en que nos hemos presentado, ha sido uno de los hechos más destacados de las primarias recientes? Somos el cuarto agrupamiento político del distrito: ¿excluirnos del debate no es una suerte de proscripción? Las encuestas nos asignan la posibilidad de incorporar un bloque de cinco a seis diputados nacionales el 27 de octubre; tenemos representación legislativa en tres provincias; estamos en varios concejos deliberantes. En la mayor parte de los distritos nos hemos transformado en la tercera fuerza.

Los agrupamientos que hoy nos excluyen, ¿han olvidado, acaso, los principios que declaman en forma reiterada? ¿Es con la exclusión del Frente de Izquierda del debate como piensan respaldar el propósito de “recuperar la República” o “rechazar el sectarismo” o “democratizar la palabra”?

TN ya está anunciando también el debate entre tres economistas de esas fuerzas. ¿No les suena que falta el cuarto? Los representantes del Frente de Izquierda hemos tenido un papel protagónico en la discusión sobre la marcha de la economía, en todos los medios y foros nacionales e incluso internacionales. Nadie lo desconoce. Si van a discutir cómo pagar a los fondos buitres y profundizar el colonialismo financiero a que está sometida Argentina, ¿la ciudadanía no tiene el derecho a escuchar a los que, con fundamentos muy sólidos, sostenemos que por esta vía se llevará a la quiebra a la Anses y al Banco Central; continuará el empobrecimiento de los sectores populares; se profundizará la precariedad laboral y el desempleo; se reiterará la política de ajustes aplicadas durante 70 años; y se llevará al país hacia un ‘rodrigazo’ y una nueva bancarrota? Reclamamos participar también de este debate de economistas, que antecederá al de diputados.

La exclusión del Frente de Izquierda del debate reúne, visiblemente, las características de una proscripción de ideas.

Llamamos al PRO, a Unen y al Frente para la Victoria a que rectifiquen su veto a nuestra presencia en el debate. ¿Cuántas veces hemos escuchado que la rectificación es un signo de fortaleza y no de debilidad? Reclamamos que hagan gala de esa fuerza y levanten el veto al Frente de Izquierda y de los Trabajadores.

Buenos Aires, 19 de setiembre de 2013