Políticas

9/9/2004|867

Amia: Otro crimen impune

El silencio de Kirchner, Estados Unidos e Israel

El 1 juicio sobre el atentado a la Amia terminó siendo un ‘juicio histórico”: sirvió a la impunidad criminal de la Side y todos los ‘servicios’.


Kirchner había denunciado que el juicio por el atentado a la Amia era “una vergüen­za nacional”. Pero no hizo lo que prometió: no abrió los archivos de la Side.


El juicio de la Amia incrimina al Poder Ejecutivo, sus ministros y sus fuerzas repre­sivas, al Poder Legislativo (con su comisión bicameral de seguimiento que avaló todo lo actuado) y al Poder Judicial.


Amia es hoy Ia punta de un iceberg; si­guen impunes la criminal explosión de Río Tercero, la represión al Argentinazo, la ma­sacre del Puente Pueyrredón, la bomba con­tra el acto en la Plaza de Mayo del 19 y 20 de diciembre del 2003, los casos de ‘gatillo fá­cil’ contra la juventud y los pobres, los se­cuestros realizados en ‘zonas liberadas’.


Todos son víctimas del mismo Estado, de la misma clase social responsable del ham­bre, la desocupación y miseria del 50 por ciento de los argentinos.


 


(5/9)


Eso sí, se profundiza la criminalización de la protesta social. A la lista de presos, se le acaban de sumar en Caleta Olivia, Santa Cruz -es decir, en la propia cuna de Kirch­ner- ocho detenidos, cuyo reclamo de pues­tos de trabajo genuino había sido reconocido por el gobierno de la provincia y las patro­nales.


El Partido Obrero, que lucha por impo­ner una alternativa obrera y socialista al ré­gimen capitalista, reclama:


-Que se abran los archivos secretos de la Side y de todos los ‘servicios’.


-Que se forme una comisión investigadora independiente con poder para investigar hasta esclarecer la verdad, y llevar a la cár­cel a los ejecutores y autores ideológicos de esta masacre.


-Que se disuelvan las fuerzas represivas y los ‘servicios’ que complotan contra el pueblo trabajador.