Políticas

23/8/2001|718

Asamblea piquetera en cada rincón de la provincia

¡Que se vayan!

La rebelión en la provincia de Buenos Aires crece minuto a minuto.


Los docentes están en huelga por tiempo indeterminado contra la rebaja de salarios y el pago en patacones “basura”; lo mismo pasa con los estatales, los trabajadores municipales van al paro por sus salarios impagos y rebajados en varios de los 84 distritos (sobre 134), donde han entrado en cesación de pagos y requieren de la coparticipación provincial para subsistir. Una parte del Poder Judicial ha resuelto su propio “piquetazo”, atendiendo sólo los casos urgentes. Los trabajadores de la salud han salido a enfrentar la quiebra de la salud pública, en un cuadro en el que los hospitales han dejado de recibir insumos y el gobierno no ha atinado a otra cosa que a la formación de “comités de admisión” para seleccionar quién puede ser atendido y quién no.


Ruckauf se pregunta: “¿cuántos maestros ganan más de 1.200 pesos?” (piso de la rebaja salarial), como si el problema fuese el reclamo de una “aristocracia” de los trabajadores, y no la resistencia a un ataque de conjunto más profundo cuando el gobierno declare que no llega al déficit cero.


El gobierno peronista no tiene ninguna salida frente a la crisis, es solo un rehén de los banqueros y a la deriva de la crisis capitalista (lo mismo le cabe a la Alianza, que votó junto al PJ el déficit cero, la rebaja de salarios y el pago en patacones). Toda su perspectiva es ahondar esta vía, despidiendo contratados, cerrando reparticiones en masa y rematando los bienes de la provincia (Ferrobaires)


No es una política, sino una huída. Una rendición frente a los acreedores de la deuda externa y los terratenientes y empresarios “dueños” del Banco Provincia y responsables de un 40 % de evasión impositiva.


¿Ley pareja?


La “patria contratista” no recibirá “bonos basura”. “Los bonos de cancelación de obligaciones para proveedores tendrán equivalencia en dólares y un rendimiento semestral del 6 %”, un negocio. Al mismo tiempo, el gobierno ha resuelto cancelar con un bono de deuda pública los créditos incobrables o morosos del Banco de la Provincia de Buenos Aires, más de 700 millones de pesos o dólares que corresponden a las cuentas impagas de los grupos Yoma, Gualtieri y varios más, y que ahora son trasladados a los habitantes de la provincia a través de un título que tiene la garantía de la coparticipación federal. Negocio sobre negocio, están “saneando” al Banco Provincia para hacer aún mas apetitosa la privatización reclamada por los banqueros.


No es todo. Se recortan los salarios a partir de los 1.200 pesos y se paga en bonos a partir de 740, pero los funcionarios de los poderes ejecutivo y legislativo se han fijado un techo de 6.400 pesos mensuales de bolsillo.


Actuar


En esta situación los trabajadores estámos obligados a actuar. Cada minuto que perdamos la penuria se hará más y más insoportable.Los comedores están dejando de funcionar por falta de fondos, las asignaciones por los planes de empleo no se depositan, la entrega de bolsones alimentarios se regatea, la atención mas elemental de los niños está en peligro.


El Partido Obrero llama a aprender de lo que hemos hecho. Hemos construído la Asamblea Piquetera Nacional y la hemos convertido en una poderosa referencia social y política para los explotados. Se trata de construirla en cada localidad, en cada rincón de la provincia para convertirla en la herramienta de lucha común por nuestras reivindicaciones, en calidad de verdadero poder del pueblo y organizador de una lucha de conjunto.


Asamblea Piquetera en cada lugar. En La Matanza, Tigre, Florencio Varela, Merlo, Moreno, San Fernando, distritos en los que la pobreza alcanza a casi el 50 % de sus habitantes (Indec, encuesta de mayo) y una de cada dos personas es pobre. Y en el resto, víctimas inexorables de esta misma catástrofe.


Asamblea piquetera para impulsar la huelga general activa.


Para deliberar y votar una lucha conjunta para conseguir el pan, el trabajo y la vivienda. Para arrancar la derogación del ajuste, la libertad de los presos, el no pago de la deuda externa, la prohibición de despidos y suspensiones, la intervención obrera en el Banco Provincia y el resto de la banca, un impuesto progresivo a la gran propiedad terrateniente, inmobiliaria e industrial para paliar el hambre y reconvertir y poner en producción a las miles de fábricas paradas, para imponer y controlar las ocho horas de trabajo y un mínimo de 600 pesos, para lograr planes de empleo para cada desocupado mayor de 16 años en la provincia y no solo para el 15 % que los posee, para disponer el cobro de impuestos en cada lugar de trabajo y en cada municipio bajo control de los trabajadores y sus organizaciones.


Asamblea Piquetera para lograr el “despido” de los responsables de esta catástrofe y la convocatoria a Asambleas Constituyentes soberanas en cada municipio y en la provincia, para que se hagan cargo del gobierno y organicen una salida en interés de los trabajadores.


Deben irse. Por “dirigir” una provincia a la que sumaron 150.000 nuevos desocupados al millón que ya existía un año antes y 330.000 nuevos pobres a los 3.5 millones en igual período; por ser los responsables de una provincia que tiene el récord de mortalidad infantil y de muertes por “gatillo fácil”, por haber duplicado el endeudamiento público sin haber generado puestos de trabajo, sólo por estas razones el gobierno provincial y los gobiernos comunales que lo acompañan deben irse.


Es una cuestión de sobrevivencia. Impulsemos una campaña por estos objetivos, desde los lugares de trabajo y las organizaciones piqueteras, establezcamos ya una coordinación de lucha.