Balance de nuestra intervención

El Partido Obrero de la provincia de Buenos Aires aprovechó las elecciones para desarrollar una campaña anticapitalista en las filas de la clase obrera y de la juventud. Se concentró en las puertas de las fabricas donde entablamos un diálogo sobre la crisis capitalista y la necesidad de abrir una perspectiva política propia. Realizamos 50 actos con la presencia de Pitrola, Laura Kohn, Daniel Rapanelli o candidatos locales. Ente ellos, importa señalar los de Ford, Pirelli, La Serenísima, Fate, Firestone, el Astillero Río Santiago. La intervención electoral estuvo directamente entroncada con las luchas y conflictos que se fueron desarrollando estos 45 días. La presencia en la gráfica FP, cuyos trabajadores estaban acampando en los accesos de la fabrica; en Pilkington, que culminó en un triunfo; en el Policlínico de Lomas, cuya continuidad está amenazada.Una párrafo especial lo merece Massuh, donde la presencia de Néstor Pitrola, coincidente con la reapertura de la fábrica, fue saludada calurosamente por los trabajadores. Muchos trabajadores nos hicieron saber que, más que un gesto de agradecimiento había una identificación con la perspectiva que encarna el Partido Obrero. Además de los actos, cada semana estuvimos presentes con una agitación en más de 100 establecimientos. Recorrimos Un objetivo: los hospitales, en especial el Mercante, del km 32 de La Matanza, el Posadas.

Fueron colocadas más de 100 mesas, semanalmente, en las principelas nudo de concentración, estaciones, ferias.

Durante 50 días, en forma ininterrumpida, los candidatos recorrieron los distritos y, a veces, dos distritos al mismo tiempo. Empezando por Pitrola, que en esta campaña recorrió una, dos o tres veces los distritos del conurbano; realizó más de 200 entrevistas con radios, diarios y medios informativos, de las cuales 70 fueron con medios del interior. Esto vale también para Laura Kokn y Daniel Rapanelli. Pero lo más importante es que hubo una verdadera legión de candidatos que jugaron un rol muy activo, entre ellos muchos jóvenes.

Una medida de la movilización la dan los fiscales. Llegamos a 2.500 fiscales. Entre esos fiscales figuran compañeros de las fábricas en conflicto a las cuales hicimos referencia. A esto se agrega una serie fábricas graficas de Avellaneda y La Matanza, del transporte, en especial de Ecotrans, del sindicato de la televisión, de estatales. En La Matanza, la mitad de los 70 fiscales que tuvimos en la elección docente se sumaron como fiscales de las elecciones nacionales. Un dato que no puede faltar es la participación de simpatizantes de la juventud.
La lucha por el voto se inscribió en la lucha por una preparación y un reagrupamiento con vistas a intervenir en la bancarrota capitalista que está en desarrollo y madurar en este proceso una oposición obrera y socialista.