Políticas

26/3/1998|578

Banco Patricios: Otro desfalco capitalista

Los trabajadores y los pequeños ahorristas del Patricios han sido víctimas de una maniobra de desfalco capitalista. El Banco Central y el gobierno menemista conocían desde hace meses la situación de quebranto del banco, pero lo ocultaban para facilitar la fuga de los grandes inversores y el resguardo de los intereses patronales. Así fueron también las quiebras del Banco Caseros y la más reciente del Banco de Crédito Provincial.


La ´suspensión’ por 30 días aplicada por el Central al Patricios y la campaña patronal y oficial sobre una posible fusión con otras entidades, o una venta, es puro diversionismo. Aún en el caso de una venta, impondrá una racionalización que dejaría la mayor parte, sino todo el personal en la calle. Sobre la base de estas consideraciones, la Comisión Gremial del Patricios impulsó el paro y la permanencia en el banco para preservar los pues­tos de trabajo e impedir que fueran tocados los valores depositados. Las asambleas reclaman que el Central se haga cargo de la preservación de la fuente de trabajo y de la devolución de los depósitos de pequeños ahorristas. El 19 y el 20, la sede central del Patricios permaneció ocupada, creando un fuerte foco de agitación pública, mientras los ahorristas indignados pateaban las puertas. El viernes 20, una nutrida y entusiasta manifesta­ción de trabajadores del banco, recorrió el microcentro y se concentró frente al Banco Central. La Bancaría, una vez más, no movió un dedo. Zanola es accionista y director del Banco del Chaco, socio del Patricios.


La patronal organiza el carnereaje


Pero mientras los trabajadores se movilizaban, la patronal organizó a un sector de funcionarios para carnerear las medidas e incluso intentar destituir a la Comisión Gremial. En una asamblea realizada en ausencia de las sucursales más combativas, esta fracción camera logró imponer el levantamiento del paro con el argumento de “mejorar su posibilidad de venta”. Esto se revelará como un fraude en corto tiempo.


Reagrupar y retomar la lucha


La posición votada no tiene ninguna perspec­tiva y se hundirá en poco tiempo. En todos los casos, los puestos de trabajo y los salarios están bajo amenaza. Hay que reagrupar a los sectores activistas y combativos para quebrar la política de carnereaje de los elementos patronales.