Luego de varias idas y vueltas entre el kirchnerismo y la oposición, la Junta Electoral de Bariloche confirmó, con solo una semana de anticipación, que la elección municipal se realizará el próximo 6 de septiembre.

 

Las elecciones en una de las principales capitales turísticas del país se desarrollarán en un cuadro de crisis social. El gobierno de Maru Martini, del FpV, ha fracasado en dar salida a las grandes reivindicaciones populares. En Bariloche el crecimiento del déficit habitacional es directamente proporcional al crecimiento de la especulación inmobiliaria. Las obras de infraestructura se limitan a los barrios céntricos y turísticos, mientras las barriadas populares carecen de ellas. Así lo atestigua la reciente inundación en el barrio del Alto, la segunda en lo que va del año. 

 

La precarización laboral y los techos salariales, han desatado una enorme huelga de los trabajadores hoteleros y gastronómicos de la ciudad. Aumentan los despidos, como se ha expresado en el frigorífico Arroyo  y en el medio periodístico ANB. La crisis del sistema de transporte no ha sido saldada, y por el contrario se prepara un nuevo tarifazo al servicio. La nueva empresa que tomó la concesión del transporte, Auotobuses Santa Fe, pertenece a la familia del funcionario K Rossi.   

 

Gustavo Genusso, es el candidato impulsado por el gobernador Weretilneck. Pretende presentarse como la alternativa superadora, pero como integrante del gobierno del ex intendente destituido Goye, se reveló como un agente de los especuladores inmobiliarios,  reprimiendo a los vecinos y trabajadores que luchaban por un terreno propio. El alineamiento de Genusso con Weretilneck y Scioli, lo inhabilita para presentarse como una alternativa a Maru Martini. El gobernador reelecto, es copartícipe del hundimiento municipal y responsable de la descomposición del aparato de seguridad. 

 

Con la excepción del FIT, el conjunto de la oposición ha gobernado, en una u otra oportunidad,  la ciudad o la provincia. Los distintos partidos municipales que se presentan a la elección representan, en su inmensa mayoría, desprendimientos del FPV, el PJ  o la UCR.

 

Los guarismos que obtuvo el Frente de Izquierda y el Partido Obrero en las recientes elecciones de agosto, nos colocan en la pelea por el ingreso de un representante de la izquierda y de los trabajadores al Concejo Deliberante. Queremos ingresar al Concejo para reforzar desde allí la pelea por un plan de viviendas populares que sanee el déficit habitacional, por un salario mínimo igual al costo de la canasta familiar y el fin de la precarización laboral, por la provincialización del transporte público bajo el control de sus trabajadores y el desmantelamiento del aparato represivo, que fomenta la inseguridad y los gatillos fácil. 

 

Desde el Partido Obrero venimos desarrollando una gran campaña por este objetivo. Hemos emitido dos declaraciones políticas con los principales ejes programáticos, que estamos colocando en mesas de agitación callejeras y en los lugares de trabajo. La agitación se combina con pintadas y pegatinas en toda la ciudad. A través de spots televisivos y radiales hemos multiplicado nuestra llegada a la población. Para el cierre de campaña, para dar el envión final, se hará presente el compañero Marcelo Ramal, primer candidato a Parlasur por el Frente de Izquierda en las elecciones de Octubre.