“Bebe” Zapata

La movilización destapó la impunidad

En la madrugada del domingo 26 de enero, fue asesinado Francisco Zapata, “Bebe”, de apenas 18 años.

Trabajador y luchador, “Bebe” era uno de los compañeros más destacados de la juventud del Polo Obrero de Maquinista Savio y, a pesar de su edad, no había movilización, piquete o acampe que no contara con su presencia.

Enfrentó los “palos” de la burocracia del Smata, cuando en medio de una agitación del PO en Volkswagen, un grupo de matones salió a impedirla. Lejos de acobardarse, pocos meses después volvió a transitar las inmediaciones de la VW, esta vez para acompañar la lucha de los trabajadores de Kraft.

Ese 26 de enero, “Bebe” advirtió que una banda de lúmpenes armados golpeaba y amenazaba a un amigo suyo, a metros de su hogar. No dudó un segundo en acercarse para frenar la pelea y sacar a su amigo del lugar. Allí recibió un disparo en la espalda y murió, poco tiempo después, en la sala de primeros auxilios de Lagomarsino, sin recibir la más mínima asistencia.
A pesar de que su funeral duró tan sólo una hora, más de 200 jóvenes se dieron cita para despedir sus restos.

Ni las autoridades del municipio ni la policía dieron un paso para dar con los responsables, perfectamente identificados y reconocidos por todo el barrio como una banda dedicada al “choreo” y a la venta de drogas, que cuenta con protección policial.

Movilización

El 2 de febrero, una contundente movilización de familiares, amigos, vecinos e integrantes de organizaciones llegó a la intendencia de Pilar para exigir justicia.

Cuando, después de cortar la ruta 26, la movilización –con más de 100 compañeros– llegó a la Fiscalía, comprobó que el fiscal no tenía informe alguno sobre la causa -a pesar de la infinidad de testimonios.

En una larga entrevista arrancada al intendente, los padres del “Bebe” y sus compañeros presentaron las denuncias existentes sobre el entrelazamiento de las bandas de delincuentes con la policía y la ausencia de toda atención médica, como también la existencia de un operativo de impunidad.

No decimos “chau”

A la familia, al papá, a los amigos, con quienes el Partido Obrero comparte el inmenso dolor y el compromiso de lucha por el juicio y castigo, por el desmantelamiento del aparato represivo –en las fuerzas de seguridad y en la Justicia.

Finalmente, con “Bebe” suman más de 2.800 los caídos por “gatillo fácil” en democracia, con el Gran Buenos Aires al tope.