Políticas

8/2/2007|980

Berazategui: El agua no existe

Berazategui


Los vecinos de Berazategui deberán acostumbrarse a pasar un intenso verano sin agua. La falta de inversión en las redes de provisión de agua potable por parte de la comuna ya provocó la escasez del suministro y presagia un verano sin agua, donde los barrios más carenciados serán los más golpeados por la falta del vital elemento.


 


Casi 40 grados de temperatura en pleno diciembre y, como todos los años, Berazategui sufre la falta de agua en gran parte de su territorio. No es casualidad: con el aumento de las temperaturas sube también el consumo de agua, con éste el servicio colapsa y gran parte de la población se ve privada de él.


 


Si bien durante todo el año desde el Gobierno se vanaglorian de que la Municipalidad es la prestataria del servicio no está privatizado, a la hora del creciente consumo no puede garantizarse una correcta distribución. Las excusas son generalmente las mismas. Acercándose el mes de diciembre desde el Municipio se informa que por culpa de la inseguridad y algunos vándalos se sufre el robo de los transformadores eléctricos que alimentan los pozos bombeadores de agua potable. Si bien dicen que frente a eso ya se tomaron precauciones, informan que todos los años sucede lo mismo. Finalmente, la pasividad del gobierno de Juan Mussi frente a la falta de un servicio básico y universal como el agua hace que hoy tadavía un gran porcentaje de vecinos se encuentre sin este insumo.


 


Una importante porción de Berazategui no está teniendo respuesta. Oficialmente se informó desde la Secretaría de Obras Públicas que podía haber zonas en el distrito con baja presión por el robo de los cables y tranformadores de cuatro pozos de agua, ubicados en el parque Pereyra Iraola, que abastecen al acueducto central. Casualmente todos los años, justo en el momento que hay más necesidad de agua y el consumo es mayor, el Municipio dice que se roban los cables. Debido a los robos de los transformadores, desde esta área se limitaron a solicitarl a los vecinos el uso racional del agua, para evitar mermas mayores. En realidad, no existe el agua, no existe el intendente, no existe el Municipio.