Políticas

8/10/2019

Claudia Neira y la hipocresía del antimacrismo del Frente de Todos

El debate de legisladores de CABA expuso los pactos entre el PRO y el kirchnerismo.

El debate a legisladores dejó algunas conclusiones interesantes. El candidato del macrismo intentó colocar su planteo por fuera del derrumbe nacional y social que impacta en la Ciudad y de la cual su gobierno es el principal responsable. Por su parte, la candidata del Frente de Todos trató de ocultar la complicidad de su frente con el gobierno de Macri y con el de Larreta. 


Un golf en Lugano


En la Ciudad esa colaboración viene de larga data y Claudia Neira, hoy cabeza de la lista de legisladores del Frente de Todos, fue una de sus protagonistas. Ante la pregunta de la candidata del FIT-U, Alejandrina Barry, sobre su apoyo a la privatización del Parque de las Victorias de Lugano para montar un club de golf, Neira justificó su votación: “para nosotros legislar es conseguir la mejor ley y para eso es necesario llegar a consensos, no quedarnos tranquilos votando todo que no. Discutimos con los afectados si esa es la mejor ley para ellos”. En esa línea, presentó como logro la integración de “contraprestaciones sociales”. 


Se trata de una impostura de punta a punta. En primer lugar porque la ley no fue consensuada con los vecinos. Se trató de la expropiación de 45 hectáreas de un parque público para hacer  un golf, un deporte que necesita de una gran extensión de tierras para un puñado de ricachones, mientras el canon que paga el club es irrisorio. Estamos hablando del parque que se ubica enfrente al predio donde fue la toma que derivó en el barrio Papa Francisco en la villa 20. Allí las necesidades de tierra son enormes, para vivienda, para esparcimiento de los pibes, para hospitales (la comuna 8 no tiene hospital) y para construir las escuelas que reduzcan la falta de vacantes. Contra esas necesidades votaron Neira y el kirchnerismo, junto al PRO. Por lo demás, es falso que solo la izquierda haya votado en contra, porque su bloque se partió en la votación y algunos rechazaron la ley. 


Más parquímetros, más hipocresía


Neira dijo rechazar la instalación de parquímetros y denunció sus fines recaudatorios. Sin embargo, en 2015 votó a favor de la ley que ordenaba ampliar el parquímetro al 45% y el sistema de grúas. Es decir que apoyaron una confiscación enorme contra los vecinos con fines meramente recaudatorios y de negociado para los contratistas amigos del gobierno. El “logro” del bloque de Neira fue dejar afuera algunos barrios que entraban en el proyecto original.


De ese modo, la política de Macri y Larreta fue avanzando en la Ciudad.


Es interesante recordar que Neira ingresó a la Legislatura en la boleta de Proyecto Sur, pero abandonó ese bloque cuando se produjo el acercamiento de Pino Solanas con Carrió y se pasó con armas y bagajes al bloque kirchnerista en el momento más escandaloso de sus pactos con el macrismo. Hoy Neira y Pino Solanas comparten nuevamente la boleta tratando de borrar las huellas de sus saltos de bando. Por su rol en la Legislatura, Neira fue premiada con un puesto en el directorio del Banco Ciudad, un banco de negocios capitalistas.


Ahora, diferenciándose de los que “votamos todo que no”, Neira pretende ridiculizar la oposición consecuente del Frente de Izquierda, que nunca votó un proyecto que perjudique a los vecinos y favorezca al capital inmobiliario. El planteo de desarrollar una oposición que consensua y busca mejorar las leyes es una impostura, es el taparrabos “progre” de la complicidad con los negocios inmobiliarios y de la patria contratista del gobierno Macri y Larreta. Funciona como un intento de presentar paliativos para evitar la organización y movilización contra las políticas del oficialismo. 


Contra los pactos PRO-K, reforcemos al Frente de Izquierda


El Frente de Izquierda votó favorablemente todos los proyectos que significaban un avance para vecinos y trabajadores, como la creación de 15 centros integrales para la mujer (del cual fuimos incluso autores), las licencias por violencia de género o la urbanización de las villas -aunque marcamos sus limitaciones con proyectos  propios.


La diferencia del FIT con el kirchnerismo es de principios porque es de clase. Los pactos PRO-K se establecieron para viabilizar una serie de negocios inmobiliarios que involucraban al gobierno de Cristina Fernández y al de Macri para favoreces al capital inmobiliario, los bancos y la patria contratista, que es la base social que comparten. Parte de estos pactos fue el perdón impositivo de 2.000 millones de pesos a Cristóbal López (a valores de 2013).


La conclusión del debate de legisladores es que Neira es la cabeza de la lista del Frente de Todos por ser protagonista de los pactos PRO – K, y no a pesar de ellos. Expresa el carácter de una lista cuyo candidato a Jefe de Gobierno, Lammens, se la pasa elogiando a Larreta.


Llamamos a los trabajadores y vecinos de la Ciudad a reforzar al Frente de Izquierda en la Ciudad, en el Congreso y en la Legislatura, para desarrollar una verdadera oposición a la política de negocios de Larreta.