Políticas

30/9/2004|870

Córdoba la tiene más clara

En lo que amenazaba con ser una de las peores semanas de su gobierno, De la Sota obtuvo un triunfo político. La Legis­latura aprobó su proyecto de ley de cre­ación de juicio por jurados populares con los votos del partido de Juez, el inten­dente de Córdoba. Juez obligó a sus le­gisladores, minutos antes de comenzar la sesión, a votar a favor del proyecto ofi­cial, luego de haber calificado al proyec­to de mamarracho y al gobierno provin­cial de manipulador.


La voltereta de 180° estuvo precedi­da por una llamada de Juan Carlos Blum­berg y también desde el gobierno nacio­nal; el ministro de Justicia nacional, Rosatti, ya había adelantado el apoyo a la ley de jurados populares.


Blumberg concertó una reunión en­tre De la Sota y Juez por el tema de la seguridad, en una provincia agitada por los vecinos del barrio Parque Horizon­te, que planteaban armarse contra los delincuentes y denunciaban a la Policía y al gobierno; días más tarde, un matri­monio de ancianos fue asesinado para robarles y una familia fue acribillada por tres chorros.


Juez y su partido, luego de reclamar la renuncia del jefe de la Policía y del mi­nistro de Seguridad ante estos hechos, en la reunión propiciada por Blumberg en la Casa de Gobierno, ofrecieron al mismo jefe y al mismo ministro toda la colabora­ción y la infraestructura del Municipio pa­ra el plan de seguridad de la provincia.


Es decir, De la Sota obtuvo la ley y sorteó una crisis de gobierno gracias a su enemigo público número uno.


Lo de Juez y sus legisladores fue una definición muy amplia, ya que no eran necesarios sus votos para que sa­liera la ley, pues de la Sota cuenta con mayoría propia. Es decir que Juez ha de­cidido sumarse al pacto Kirchner-Duhalde, o sea, al operativo político del FMI y Techint. El gobierno de De la Sota-Juez tiene un endeudamiento de 7.000 millo­nes de pesos y el 80% de los ilícitos cuenta con la participación de funciona­rios policiales y/o políticos; crímenes co­mo el de Maders, Corradini o el niño Da­vid Moreno siguen impunes.


Luego que Juez se sumó a De la So­ta, las radios tronaron con mensajes de repudio de los votantes de aquél.


Córdoba la tiene más clara.