Hace quince días, un plenario de organizaciones sindicales del NOA resolvió convocar a una “Marcha Federal” para el 14 de junio (arribo a Plaza de Mayo). El objetivo asignado a la movilización era exigir un aumento de emergencia, la liquidación de la “jubilación privada” y la “reforma laboral”, el rechazo al Pacto Fiscal y la “defensa de las economías regionales”. Carlos Santillán declaró públicamente que las direcciones del NOA eran partidarias de lanzar un paro nacional en la propia “Marcha…”, comprometiendo al CTA y MTA, para garantizar la continuidad de la lucha.

El CTA, ATE y De Gennaro en particular, plantearon de entrada su oposición a esta convocatoria y supeditaron la fecha y las características de la “Marcha” a los acuerdos con las organizaciones “sociales”, en referencia al “Congreso del Trabajo y la Producción”, que reúne a los sindicatos del CTA junto a organizaciones patronales como la Federación Agraria Argentina (FAA) o Apyme (pequeños y medianos empresarios). La movilización de los explotados del NOA quedaba desvirtuada así en lo que hace a su autonomía como a sus reivindicaciones —ya que tanto la FAA como Apyme son rabiosos defensores de la “reforma laboral” y de la “jubilación privada”.

La consecuencia del “pluriclasismo” de De Gennaro y Cía. es que la “Marcha” ha quedado postergada, justamente cuando la huelga del Smata y de Tierra del Fuego, sumadas al golpe asestado a la privatización jubilatoria, más la reclamaban —con lo que la burocracia del CTA ha logrado desvaratar un movimiento nacional que podía llevar a un paro nacional.

“Congreso del Trabajo y la Producción”

La conducción del CTA y de ATE han repetido una conducta que pareciera ritual, pero que no lo es. Ante cualquier movilización o iniciativa de lucha, De Gennaro convoca a las “organizaciones sociales”, es decir, anti-obreras y, por lo tanto, anti-sociales, para encuadrar la intervención de los trabajadores en función de los intereses y reclamos de la patronal, que no difieren en relación a la clase obrera de los que plantea el conjunto de la clase capitalista. La FAA reclama la devaluación, que se descargará sobre los trabajadores, o el subsidio proveniente de las arcas del Estado, que irá a las mismas espaldas. Humberto Volando, su presidente, participa de Orígenes, la AFJP del Banco Provincia. Apyme representa a las patronales que plantean desarrollarse por la vía de la “tercerización”, un recurso para “bajar costos” de los grandes pulpos a través de la “flexibilización laboral” y del trabajo precario.

Las direcciones del CTA están empeñadas en poner en pie un movimiento, no pluriclasita, sino de colaboración de clase (que es otra cosa). La consigna de la “Marcha…”, en la “versión de De Gennaro y Mary Sánchez” debía ser… “por un país para todos”, es decir para las patronales electrónicas de Tierra del Fuego y sus obreros, para Macri y los trabajadores de Sevel, o para los pulpos azucareros y los laburantes de los ingenios— es decir para los saqueadores y los saqueados.

Chacho, Storani, Bordón

Por estas mismas razones, las direcciones del CTA (y del Frente Grande) no quieren ninguna movilización que profundice el curso abierto por las grandes luchas del interior del país y del movimiento obrero. Esto explica que después de haber fijado una nueva fecha (que sería el 6 de julio), las organizaciones del CTA mantuvieron la abulia anterior respecto a la movilización.

La política del CTA, en general, y de De Gennaro, en particular, se inscribe en el intento de tejer, entre el Frente Grande, Storani, el bordonismo y el MTA. El CTA y el Frente Grande plantearon inicialmente que la “Marcha…” se realizara sobre la Asamblea Constituyente en Santa Fe y no a Plaza de Mayo, para desviarla del objetivo del paro nacional y darle oxígeno a la Asamblea moribunda. Marchar a Santa Fe para encubrir a los bloques “opositores” que están convalidando la Constituyente de los “decretos de necesidad y urgencia” que es un instrumento de la violencia menemista. El papel político clave en la operación de salvataje de la Constituyente lo está cumpliendo, a los ojos de todo el mundo, el Frente Grande. Como señalamos desde el primer momento, bastaría  que el bloque del Frente Grande se retirara de la Constituyente y denunciara su carácter para que la Asamblea caiga en el descrédito más completo y se abriera la oportunidad de un plan de lucha por la vigencia de los derechos democráticos.

Paro nacional

En un reciente plenario preparatorio de la “Marcha…”, convocado por la CGT San Lorenzo, Quiroga, dirigente de esta CGT, planteó agudamente la contradicción que representa una convocatoria junto a las “organizaciones (anti)sociales” que forman parte del “Congreso del Trabajo y la Producción”. Quiroga planteó que el acuerdo alacanzado en el plenario de organizaciones del NOA el 1º de Mayo planteaba como punto fundamental la liquidación de la “flexibilidad laboral”, en tanto que ahora aparece una convocatoria junto a las “pequeñas y medianas empresas” que fueron a pedirle a Reutemann la aplicación de esa “flexibilidad laboral”. “Son patrones pelotudos —dijo Quiroga— que creen que se van a salvar explotando a los obreros”, y criticó la postergación de la “Marcha…”.

Denunciamos la operación de desvío y de estrangulamiento por parte de la burocracia del CTA y llamamos a reclamar un paro nacional ya, porque la lucha de los trabajadores fueguinos no puede esperar, el reclamo de los jubilados por los 450 pesos tampoco y porque hay que darle el tiro de gracia a la quiebra de la “jubilación privada” y de la reforma laboral.

Paro nacional, para luchar sin adulteraciones por el programa que levantan las masas: retiro del proyecto de reforma laboral, derogación de la jubilación privada, recuperación del 82%, salario mínimo de 1.000 pesos, juicio y castigo a los asesinos de Carrasco, retiro de las leyes que destruyen la Universidad estatal.