Defendamos el derecho al trabajo


El debate electoral oculta una cuestión que sacude a miles de trabajadores: los despidos y suspensiones en la gran industria.


 


Paraná Metal, regenteada por el capo K Cristóbal López, anunció su cierre a fecha cierta.


 


En Fate acaban de disponerse suspensiones masivas.


 


El mismo panorama asuela a Fiat y las otras automotrices de Córdoba; o Peugeot, con más de mil despidos, abiertos o encubiertos, en el último año.


 


Detrás de ellos vienen los obreros de la industria autopartista y metalúrgica.


 


En Brasil y Argentina, los mismos pulpos automotrices que se han servido del Mercosur como fuente de beneficios cuantiosos, no vacilan ahora en suspender y despedir.


 


Entretanto, los candidatos oficialistas y opositores quieren premiar a los cesanteadores con una devaluación y una renovada presión sobre las condiciones laborales de sus trabajadores.


 


La responsabilidad de colocar la agenda de la clase obrera, en las elecciones y en la crisis nacional, le cabe por entero al Frente de Izquierda.


 


Planteamos:


 


• Prohibición de las suspensiones y despidos; reparto


de las horas de trabajo sin afectar el salario.


 


• Por una reconversión industrial sobre nuevas


bases sociales, para terminar con el parasitismo


capitalista y defender incondicionalmente el derecho


al trabajo.


 


• Por una acción internacional de los trabajadores


de la región por estas reivindicaciones. Que


la crisis la paguen los capitalistas.