Desde hace dos meses y medio, la burocracia de los ministerios de Desarrollo y Acción Social está pateando la posibilidad de que más de 500 familias puedan acceder a los alimentos que fueron remitidos desde Buenos Aires para los comedores del Polo Obrero. Se niegan rotundamente a poner en los circuitos de los comedores del Polo Obrero, argumentando que las condiciones en que funcionan los mismos no son las correctas: que los baños deberían estar un metro más atrás, que el piso es de tierra…

 

Mientras en Santiago del Estero crecen los casos de desnutrición y la provincia se encuentra en el cuarto lugar del país en cuanto a población en estado de desnutrición, el gobierno y sus ministerios están criando un rejunte de camarillas que se van transformando en punteros del oficialismo a través de las “mesas de política social”. Igual que gobiernos anteriores o peor aún. Quieren poner en pie una organización de punteros que sólo se aprovechan de la necesidad de los más pobres y trabajadores para imponer una política de cooptación a dirigentes populares y apuntalar un régimen asistencial. El mismo gobierno que mantiene trabajadores en negro dentro de la administración pública y ministerios, mediante planes de emergencia laboral y contratos de locación, el mismo gobierno que admite que el 50% de los santiagueños trabaja en negro.

 

Mientras los funcionarios tienen sueldos, gastos reservados y demás fondos, les importa realmente muy poco si la gente se muere de hambre.

 

Abajo la camarilla de punteros. Abajo la burocracia y los funcionarios de panzas llenas que se enriquecen con el hambre del pueblo trabajador.

 

• Trabajo genuino para todos.

 

• Basta de trabajo en negro y reducción de la jornada laboral a 6 horas.

 

• Vivienda digna.

 

• Basta de hambre.