Políticas

24/1/2002|738

El Frenapo, ni con calzador

El Frenapo se ha lanzado a “hacer pata ancha” en las Asambleas Populares de la Capital. Con el auxilio del PC, que en varias reuniones barriales lo introdujo de la mano, elementos de la CTA, del Frepaso o del Polo Social pretendieron adscribir las Asambleas barriales al propio Frenapo. En algunas, planteando que el proceso de sublevación popular abierto en el país se inició con la consulta popular de la CTA; en otras, impulsando iniciativas como las de poner en práctica la ley de comunas en la Capital y el presupuesto participativo, ocultando a la gente que los ibarristas y el ARI se han opuesto sistemáticamente a ello, en la Legislarura. Lo mismo intentaron al pretender encabezar la manifestación de los motoqueros al mes del asesinato de sus caídos en las jornadas del 19 y el 20/12.


Lo que no tuvieron en cuenta es la conciencia generalizada que existe acerca del papel del Frenapo-CTA en las jornadas del 19 y 20, cuando sus dirigentes llamaron a abandonar las calles, mientras se libraba la lucha encarnizada que terminó con De la Rúa y con Cavallo. Tampoco el repudio entre la masa de los trabajadores porteños a los superpoderes otorgados a Ibarra, adherente al Frenapo, que también votó el ARI, y al ajuste y la “pataconización” que prepara para la Ciudad. La gente todavía recuerda las reiteradas salidas de Carlos Heller, banquero que integra la Mesa del Frenapo, en defensa del “corralito” de Cavallo, luego de Rodríguez Saá y ahora de Duhalde. Menos escapa a los asambleístas populares, la participación del Frenapo y la CTA en la Concertación y la mesa del “diálogo argentino”, junto a las CGT, las cámaras patronales, la Iglesia y el imperialismo, para cumplir el papel de cordón sanitario del gobierno de Duhalde, mientras el pueblo lucha en las calles contra él y su política.


De hecho, en varias asambleas barriales y en las dos interbarriales de Parque Centenario, los elementos frenapistas fueron abucheados.