Políticas

27/2/2014|1303

El Frente de Izquierda, segundo

CIUDAD DE MENDOZA

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Cuando aún faltan varias semanas para las elecciones de concejales de Mendoza capital, ya se van verificando las primeras tendencias, que al momento, marcan el lugar de largada de cada lista. En ese sentido, vale analizar la primera encuesta publicada. En ella, el dato más importante es el siguiente: el Frente de Izquierda estaría en segundo lugar con un 20% de los votos. Se trata de un avance muy importante de la ya notable elección realizada el 27 de octubre pasado. En esa oportunidad, el Frente de Izquierda había obtenido en la capital de Mendoza un 15%, o sea que estos 5 puntos más equivalen a un salto del 33%. Estos guarismos habilitan a pelear por la entrada de dos concejales, sobre un total de los seis que se eligen.

La encuesta viene a ratificar también algo que parece previsible: el hundimiento del kirchnerismo. En la última elección su derrota ante la UCR había sido categórica. En la capital provincial habían obtenido sólo unas centésimas más que el Frente de Izquierda. El retroceso ahora se profundiza y podría quedar relegado al cuarto lugar. Para el peronismo, que encima detenta la Gobernación, un resultado así equivale a una bancarrota política mayúscula. La lista kirchnerista es un reflejo de esa crisis. El PJ, incluido los sectores que responden al gobernador Paco Pérez que busca un acuerdo con Scioli, le han entregado las candidaturas a La Cámpora. Seguramente, el pase de facturas será de todos contra todos.

La UCR, que ganó ampliamente la elección del 27 de octubre con Cobos, ahora se enfrenta a un cuadro político distinto, pues ella es el oficialismo en la capital. El intendente Fayad, sin embargo, es de un ala anti-cobista, muy cercana al gobierno provincial. Se trata de un gobierno con un gran desprestigio. El cobismo ha decidido armar una lista común, lo cual le puede representar una merma de votos. Algo de eso marca la primera encuesta que se conoce, en la cual la UCR estaría cayendo varios puntos. Parte de esos votos podrían ir al frente del Partido Demócrata y el PRO, que han realizado el 27 de octubre una elección pésima. Han recurrido a un cambio de cara, poniendo un candidato joven, hijo de un empresario. Su caracterización es que la gran elección del Frente de Izquierda reflejó un fenómeno de “anti-política”, favorecida por sus jóvenes candidatos. Se trata de un abordaje superficial, que no tiene en cuenta la crisis social de la provincia, la precarización laboral generalizada, e incluso el retroceso de los sectores medios, que reflejan en general la ofensiva del gran capital, agrario y minero, contra la pequeña propiedad.

La campaña deberá dar cuenta de la crisis política provincial y del ajuste que se está enjuagando en la Legislatura entre el PJ y la UCR. La aprobación del Presupuesto aún está pendiente, porque los diputados de la UCR se niegan a votar el endeudamiento solicitado por el gobernador. En su lugar reclaman que la deuda provincial sea afrontada con un ajuste del gasto social. Las negociaciones irían en dirección a esta posición ajustadora. Este ajuste tendrá el primer capítulo en la paritaria docente, donde el gobernador seguirá la línea nacional de un aumento por debajo de la inflación.

La cuestión del Presupuesto se combina con la aparición de despidos y suspensiones, para la cual no hay respuestas oficiales. A pesar de que aún nuestros diputados y concejales no han asumido, haremos una fuerte campaña con los proyectos elaborados por el Frente de Izquierda reclamando un salario igual a la canasta familiar y la prohibición de despidos y suspensiones.

En este cuadro, el Frente de Izquierda se esforzará en hacer de esta elección de Mendoza Capital, el primer test (y el único hasta el momento) electoral del año, un verdadero pronunciamiento popular contra el ajuste de pejostistas y la UCR. Contra los despidos y suspensiones, contra la destrucción del salario, en defensa de los reclamos populares.

Con este objetivo declarado hemos lanzado ya la campaña electoral. Iremos midiendo los avances alcanzados a través de una creciente organización de trabajadores y jóvenes que se sumen activamente al impulso de la campaña.


Víctor da Vila