Según el Observatorio de la Universidad Católica Argentina (UCA), la tasa de pobreza se ha incrementado del 29% a fines de 2015 al 34,5% en marzo de este año, lo que equivale a 1,5 millones arrojados a la pobreza, alcanzando ahora un total acumulado de 13 millones. A su vez, la tasa deindigencia habría pasado de 5,3% a fines de 2015 a 6,2% en marzo de 2016, es decir un aumento de por lo menos 350 mil personas en situación de indigencia, sobre un total de 2,5 millones. A los elevados niveles de pobreza dejados por el kirchnerismo, el macrismo le ha agregado su “aporte”.

Según el informe de la UCA, en abril de 2016 aquella familia cuyos ingresos no llegan a cubrir una canasta básica total (CBT) de 7.877 pesos es pobre. Mientras que ingresa en la indigencia aquella que no llega a los 3.769 pesos que cuesta la canasta básica alimentaria. Y se trata, dicen los autores del estudio, de canastas sin actualizar (Apertura, 1/4).

De ser estos números reales, el llamado “gradualismo” del paquete ajustador ya estaría materializando sus bondades sobre la espalda de los trabajadores. Cabe señalar que los informes de la UCA venían marcando un ascenso de la pobreza en los últimos años del kirchnerismo. Este ascenso explica el apagón estadístico (el último dato sobre pobreza del Indec es de 2013) y la justificación de Kicilof de no ‘estigmatizar’ a los pobres.

“Teníamos pensado dedicarnos a la presentación de un informe sobre pobreza y desigualdad de 2010 a 2015, pero ante la situación económica complicada vinculada al aumento del costo de vida y al actual proceso inflacionario nos vimos obligados a abordar la situación actual”, declaró Agustín Salvia, director del Observatorio de la UCA.

La difusión de este informe revela los temores de la Iglesia católica a un desborde social: las medidas de ajuste tienen un carácter social y político convulsivo.