Políticas

15/8/2013|1281

El jujeñazo que paso…

(y el que preparamos para octubre)

Con el casi el 100% de las mesas escrutadas, la novedad política de estas Paso 2013 en Jujuy la dio el Frente de Izquierda, con una elección del 9% (más de 29.000 votos, a un escaso millar de ser la tercera fuerza política).


En la capital obtuvimos más de 15.000 votos, siendo la tercera fuerza en la elección, lo mismo en los distritos industriales de Ledesma, San Pedro y Palpalá; en el Departamento de Tilcara y en Perico. La importante votación en los departamentos industriales de la provincia no ha sido casualidad, tampoco en la capital. Se debe a un sistemático trabajo sobre los sectores obreros que venimos realizando los partidos del Frente de Izquierda en cada zona. El Frente triplicó los votos de las Paso 2011. Un dato significativo de la elección fue la relativa homogeneidad del voto en casi todos los departamentos, lo que nos presenta como una fuerza reconocida en el interior de la provincia.


Este resultado expresa la capitalización por parte del Frente de Izquierda, de una tendencia que tiene un alcance nacional. En la provincia, pudimos capitalizar el agotamiento de las estructuras partidarias tradicionales, que han producido crisis al interior de sus partidos.


A este escenario se suma una lucha constante de trabajadores en la provincia, que tuvieron como expresiones destacadas las de los estatales que, desde marzo, están tratando de romper el techo del 24% en las paritarias. También se registró un paro histórico de 48 horas de los trabajadores de Ledesma. También los médicos comunitarios y rurales por el pase a planta y un aumento salarial.


La debacle del centroizquierda


Otro dato de las elecciones fue la disolución del centroizquierda en la provincia, que fue de furgón de cola de armados patronales. El FAP se dividió: el PS acompañó a la UCR en el


Frente Jujeño y el resto (GEN, UP de Lozano, ARI, CC y otros) fue de furgón de cola del Frente Primero Jujuy, un armado oportunista entre Isolda Calsina (diputada provincial por un frente con los radicales) y Alejandro Snopek (apellido fuerte del peronismo conservador en la provincia), bajo el padrinazgo del Peronismo Federal de De la Sota.


En este marco, hicimos una fuerte campaña en la que planteamos que la agenda de los trabajadores sólo podía ser llevada adelante por el Frente de Izquierda. En este sentido, tuvimos una clara delimitación con las otras listas de "izquierda" (MST y Pueblo Unido), las que hicieron una campaña de consignas vagas y con el objetivo de impedir el desarrollo de una alternativa política independiente de los trabajadores.


El gran derrotado de la elección fue el gobierno de Fellner-CFK, el que perdió más de 50.000 votos con respecto a la elección anterior.


Lo que sigue


La campaña ha dejado decenas de contactos que manifestaron su apoyo, se anotaron voluntariamente para fiscalizar o se llevaron nuestras boletas para repartir entre sus conocidos. La tarea ahora es organizarlos para que nos permita llegar a más jujeños.


La importancia de la elección realizada es que deja planteada la posibilidad real de obtener una banca en las legislativas provinciales de octubre (junto con las generales) y la posibilidad de pelear un concejal en la capital. Para esto, tenemos que multiplicar nuestros esfuerzos, consolidarnos donde tenemos un trabajo y superar el déficit que tuvimos en la campaña: el norte de la provincia.


El Partido Obrero de Jujuy se prepara para la nueva etapa. Esto recién comienza.