Políticas

16/12/2010|1159

El miércoles 8, una movilización crucial

En el feriado del miércoles 8, el país amaneció con la noticia de una nueva represión feroz con otros dos muertos. Al mediodía, y en el predio del Soldati, una conferencia de prensa de “Memoria Verdad y Justicia”, junto a los parientes de los asesinados, denunció el nuevo crimen policial. Por la tarde, íbamos a realizar una marcha por el centro porteño. El curso de los acontecimientos obligó, sin embargo, a cambiar el rumbo. Durante la mañana, los ocupantes fueron reinstalándose en el predio, para retomar su lucha por el techo. Pero pasado el mediodía, un “piquete” de la Metropolitana comenzó a actuar provocativamente contra ellos. De inmediato, dirigentes políticos, barriales y vecinales nos interpusimos para impedir una nueva represión. En esas condiciones, la marcha del centro se trasladó a Soldati: hacia las tres de la tarde, miles de militantes, entre ellos una gruesa columna del PO de Capital, marcharon desde Cruz y Escalada hasta la toma, ante la emoción de los ocupantes. La movilización se dirigió luego a bloquear las oficinas de la Unidad de Gestión Social (Ugis) del gobierno de Macri, donde se exigió la provisión de agua, alimentos y asistencia sanitaria a las familias. La masiva movilización del miércoles fue decisiva para impedir un nuevo desalojo. En los días siguientes, el PO denunció la tentativa de liquidar a los ocupantes liberando la zona, por un lado, y sometiéndolos al hambre, por el otro. Nuestros militantes trabajaron todo el tiempo en la solidaridad y organización de los ocupantes, en la elección de delegados y en la lucha política contra los punteros oficiales.