16/12/2004|881

El pacto Kirchner-Reutemann


En Santa Fe –la provincia que concentra el mayor poder político de los “transversales” de Kirchner–, se acaba de anunciar, sorpresivamente, una “formal y decisiva alianza” entre Kirchner y Reutemann, para “trabajar en forma conjunta para la renovación del Congreso, el año próximo, y establecer una corriente interna para las elecciones presidenciales y de gobernador en 2007” ( La Nación , 26/11). Carlos Reutemann es un hombre del Departamento de Estado norteamericano y de la burguesía sojera y aceitera que se ha enriquecido como nunca en el último tiempo y se alineó a favor de los acuerdos con China.


 


Reutemann representa intereses sociales capitalistas que tienden a divergir de los que tienen como vocero a Duhalde.


 


Kirchner y Reutemann consideran que el derrumbe del radicalismo le ofrece al peronismo la victoria en el 2005, sin necesidad de ley de lemas, aunque reemplazándola por internas abiertas, simultáneas y obligatorias, las cuales servirán para verificar los votos que conseguiría el nuevo acuerdo.


 


Pero el pacto entre el nacionalista de Santa Cruz y el entreguista de Santa Fe, y la derogación de la ley de lemas, permitirían avanzar en otro propósito: una reforma política que elimine la representación proporcional mediante el establecimiento de una Legislatura unicameral (como en Córdoba), una de cuyas mitades sea ocupada por representantes de las diferentes circunscripciones en que se divida la provincia. Este “cambio” no solamente haría la delicia de los intendentes sino que conduciría a la supresión electoral de la mayoría de los partidos, dejando en pie un sistema uni o bipartidario. Si esto conforma a los “transversales” del PS (el principal partido de la oposición), Kirchner y Reutemann podrían gritar ‘bingo’ y ponerle una tercera pata al pacto.