El ParlaNoa es una instancia que a reúne representantes de los diferentes bloques políticos de las legislaturas de las provincias del noroeste argentino (Tucumán, Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Catamarca y La Rioja). En esta oportunidad, sesionó en Tucumán.

En representación del Partido Obrero se hizo presente la senadora provincial por Salta, Gabriela Cerrano, quien presentó un proyecto de resolución para declarar la emergencia en derechos humanos en todo el NOA. El proyecto, además, solicitaba al Congreso de la Nación y a los parlamentos provinciales la creación de una comisión bicameral investigadora de los derechos humanos, integrada por diputados y senadores nacionales, y por referentes de organismos de derechos humanos, organizaciones políticas, sindicales y sociales de las provincias del NOA, y Familiares y Víctimas de la impunidad.

Según el reglamento del Parlamento del NOA, está contemplada la creación de comisiones especiales para investigar o estudiar determinados temas.

Confluyendo con esta iniciativa del bloque del Partido Obrero, la Comisión de Familiares Víctimas de la Impunidad de Tucumán -encabezada por Alberto Lebbos, y acompañada por un centenar de compañeros del PO- se movilizó el viernes a la Legislatura para presentar un petitorio que contemplaba numerosas denuncias de atropellos y violaciones a los derechos humanos en la región; además, había solicitado hacer uso de la palabra en la sesión plenaria del ParlaNoa.

Los representantes de todos los bloques patronales, oficialistas y opositores ningunearon estas inquietudes.

El jueves, la comisión parlamentaria que debía dictar dictamen y resolver si el proyecto de resolución presentado por el Partido Obrero iba a tener tratamiento, lo archivó con el argumento de que en las provincias del NOA no hay evidencias de violación a los derechos humanos.

El viernes, a la delegación de la comisión de Familiares, primero se la hizo esperar varias horas fuera de la Legislatura, bajo el sol, y luego sólo permitieron el ingreso de cuatro representantes, informando que recién al finalizar la sesión plenaria del ParlaNoa se les iba a dar el uso de la palabra. Los cuatro voceros de la Comisión de Familiares que ingresaron fueron encerrados en un cuarto vigilado por numerosos policías; como pasaban las horas sin ser atendidos, decidieron retirarse, actitud que fue acompañada sólo por la senadora del PO, Gabriela Cerrano.

Ha quedado demostrado una vez más que el ParlaNoa es un conciliábulo de los patrones regionales y del gran capital.

De los cuarenta proyectos presentados, sólo fue desechado el presentado por el PO -que impulsaba una iniciativa para enfrentar las violaciones de los derechos humanos y todo el andamiaje de impunidad que desde los poderes públicos amparan al crimen organizado.