El 16 de diciembre el Partido Comunista realizó una reunión de Comité Central que fue reseñada en su periódico Propuesta. El capítulo relativo a la cuestión electoral, confirma su convergencia con el banquero Carlos Heller, Lozano, Cafiero y Bonasso. El PC está en tratativas para un acuerdo electoral con Ibarra. La masacre de Cromañón no modificó ni un milímetro su política. En Santa Fe apoya al representante de la patria exportadora, el socialista Binner, y en Entre Ríos va en un frente que incluye al sector de Lavagna.

 

Desde el momento que el banquero del PC, Carlos Heller, anunció su alianza electoral con Ibarra, los familiares de Cromañón se entrevistaron con el PC y le pidieron en una carta abierta una desmentida pública. Lejos de esto, el periódico del PC confirmó que están con Ibarra.

 

En el informe del CC, el PC se dice que “los espacios con los que contactamos son los que se desarrollan en el movimiento cooperativo (sic), en la construcción del Partido Solidario encabezado por Carlos Heller y el que se denomina Movimiento por Buenos Aires, encabezado por Claudio Lozano… Este es el espacio que privilegiamos, con participación de otros militantes… y otras fuerzas con quien se realizan conversaciones, como el PRD de Miguel Bonasso”. Es decir que van con el kirchnerismo, al que Echegaray caracterizaba hasta ahora como “una continuidad del neoliberalismo”.

 

Claudio Lozano fue uno de los más fervorosos ideólogos de la Alianza; Carlos Heller simplemente un privatizador de la jubilación estatal; Miguel Bonasso, un lamebotas de Kirchner como pocos, que apoyó el envío de tropas argentinas a Haití. El “valor agregado” de este frente no es, ciertamente, Ibarra.

 

El PC vuelve a sus orígenes luego de que fracasará, en toda América Latina, para disimular el hundimiento del stalinismo con los frentes tipo Izquierda Unida.