Políticas

16/2/2012|1211

El PCR reclama la militarización

El PCR (Hoy, 8/2) aconseja una política de rearme militar, de cara al conflicto de Malvinas. Curioso de parte de un partido que plantea "la insurrección popular" (la cual se supone que chocaría contra el aparato armado del Estado) o que aboga por mejoras del gasto social (el que sufriría las consecuencias de un rearme) -sin mencionar que nos llevaría a una compra masiva de armamento a las potencias imperialistas del planeta. No quiere decir que el PCR abogue por la guerra, pues responde con un "es justo hacerlo" que "la Presidenta ponga como único objetivo reabrir el diálogo" El 'diálogo' -es sabido- lleva a una componenda con el imperialismo yanqui sobre las islas.


Haciéndose eco de otros planteos (Tokatlian, La Nación 2/2), el PCR critica que la ex ministra de Defensa, Nilda Garré (ahora ministra de Seguridad), silencie el proyecto "de retomar la fabricación de submarinos de propulsión atómica. Este, añade, fue uno de los proyectos enterrados por Menem cuando se arrodilló frente a Bush. El costo de fabricación de cada submarino se puede recuperar con la venta de dos de esos sumergibles" -aconseja como si fuera ministro de Guerra de la oposición.


El PCR propugna "otro proyecto también enterrado por Menem", el del "misil Cóndor con un alcance de 900 kilómetros (hasta Malvinas y el mar aledaño, donde estarían los proyectos petroleros), muy superior a los misiles actuales que, por su alcance, están dentro de lo pactado por Menem en los acuerdos de Madrid: no pueden alcanzar ningún objetivo de la zona colonizada" Impulsar la militarización del gobierno de la megaminería, la privatización petrolera, el ajuste y la Ley antiterrorista es un menú exquisito viniendo de la izquierda binnerista. Al final, si no tuviera otro uso, podríamos con esto reforzar la presencia argentina en Haití, o seguir las maniobras militares con la IV Flota. ¡Hasta nos podría servir para ayudar a Moreno en las disputas comerciales con Brasil!


El PCR no evade el tema, pues sugiere una alianza militar de la Unasur, de modo que la fabricación de los misiles se podría hacer en conjunto con Brasil -música en los oídos del gran capital brasileño. Sin pelos en la lengua plantea, en relación con los misiles, que "incluso se podría hacer el desarrollo junto con Brasil, cuyas autoridades hacen trascender su disgusto por el 'flanco descubierto' que deja la ausencia de una fuerza militar disuasiva en la Argentina" (ídem, 8/2). Nada mal para un 'comunista' preocuparse por el 'flanco descubierto' de los armamentistas brasileños.


En momentos en que el gobierno K pretende realizar un ajuste, el PCR le propone que, para el conflicto de Malvinas, "en lo estratégico" tome "medidas que apunten a construir una fuerza disuasiva (lo que no significa grandes costos)" (sic).