Políticas

19/11/2015|1390

El voto en blanco del Partido Socialista: una estafa y un apoyo al ajuste


El socialismo santafecino definió su posición de votar en blanco en el balotaje. Los dirigentes “socialistas” se encargaron de aclarar que solo es una definición para los militantes de su partido y que “no militaran por el voto en blanco” (LaPoliticaOnline, 20/10), es decir que rechazan la lucha por separar a los trabajadores de los candidatos del ajuste. 


 


De hecho, es el propio PS el que reclama el ajuste. El gobernador electo de Santa Fe, Miguel Lifschitsz, afirmó como los principales objetivos de su futuro gobierno atraer inversiones y aumentar las exportaciones, que en la provincia se dividen principalmente entre las exportaciones de soja y otros granos, autos y la industria de la leche, pero aclaro que estos planes se pueden llevar adelante “en la medida en que se ordenen algunas cuestiones de la macroeconomía” (La Capital, 10/11). En esta perspectiva, los representantes del “socialismo” santafesino mantuvieron una reunión con representantes de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, de la que participaron representantes tanto del macrismo, como del sciolismo.


 


En estas condiciones y en un cuadro de quebranto fiscal en la provincia (el gobierno tuvo que endeudarse en dos mil millones de pesos para pagar sueldos), el voto en blanco del socialismo, más que un rechazo a las políticas de ajuste que preparan ambos candidatos, es un voto de confianza a los dos. Por esto mismo el actual gobernador de Santa Fe declaro que “con el futuro presidente vamos a establecer el mejor vínculo y relación” (InfoNews, 10/11).


 


Después del papelón de Unen, de haber arañado en la provincia un triunfo exiguo sobre el PRO y el fracaso rotundo de la candidatura a senador de


Hermes Binner, el “socialismo” santafecino, arrojado ahora a reclamar un ajuste contra el pueblo, está atravesado por una crisis profunda. Su principal aliado provincial, el radicalismo, ya está coqueteando con la posibilidad de establecer un acuerdo con el PRO de Santa Fe, lo que significaría un paso más en el aniquilamiento del progresismo argentino.


 


El Frente de Izquierda llama a votar en blanco con una perspectiva completamente opuesta a este “socialismo” de pacotilla.